CARENCIAS EN EL SECTOR MANUFACTURERO

Bruselas alerta de la debilidad de la industria española

La Comisión Europea critica las trabas administrativas, la baja tecnología y que la competitividad se gane a base de despidos

ELISEO OLIVERAS / Bruselas

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A pesar de las mejoras de los últimos años, la aportación de la industria española a la economía nacional se sitúa por debajo de la media de la Unión Europea (UE), el sector manufacturero se caracteriza por estar especializado en la baja tecnología, la inversión en investigación y desarrollo del sector privado es "escasa" y la recuperación de la competitividad se ha realizado a basa de "la destrucción masiva de empleo". Estas son algunas de las demoledoras conclusiones del informe sobre competitividad de la industria en la UE presentado por la Comisión Europea y el resultado de más de 30 años de pasividad gubernamental frente a la destrucción del tejido industrial.

La aportación del sector manufacturero al valor añadido total de la economía se sitúa en España el 13,3%, mientras que la media de la UE se sitúa en el 15,3%., precisa el informe. "Las empresas españolas están especializadas en la fabricación de baja tecnología (productos alimenticios y bebidas, textil, confección, etc) y en servicios de baja intensidad de conocimientos (comercio, alojamiento, cafeterías y restaurantes, agencias de viajes, etc)", destaca el estudio comparativo europeo.

"Los sectores de alto valor añadido, como las industrias de alta tecnología y los servicios con uso intensivo de conocimientos siguen estando infrarrepresentados", tanto en el número de empresas y trabajadores.

Pese al incremento de las ventas de productos españoles al extranjero, el informe precisa que casi el 88% de las exportaciones realizadas durante el 2012 fueron realizadas por solo el 10% de los exportadores, lo que muestra que la gran mayoría de empresas exportadores son poco competitivas.

En contra de las declaraciones oficiales del Gobierno, el plazo para poner en marcha un negocio en España asciende a 28 días y "sigue estando por encima de la media de la UE". "El marco jurídico y reglamentario sigue siendo muy complejo", "resulta difícil poner en marcha un negocio" y "el sistema de concesión de una licencia de explotación es el más largo de la UE, 116 días", lamenta el informe de la Comisión Europea.

Desaparición de cajas

La restructuración del sector financiero y la enorme concentración del sector bancario español con la desaparición masiva de cajas de ahorro ha dejado a muchas pequeñas y medianas empresas "sin su banquero tradicional", lo que ha incrementado "los costes" y la dificultad de estas empresas en encontrar crédito, añade el informe. "Los problemas de liquidez de las empresas se han agravado por los largos retrasos en el pago del sector público", indica en otro apartado el informe.

Los problemas de la industria española se ven agravados por "el bajo nivel de inversión privada en investigación y desarrollo, el reducido número de pequeñas y medianas empresas innovadoras, los bajos ingresos por licencias y patentes en el extranjero, la reducción del 27,3% de estudiantes universitarios en ciencias en los últimos diez años y la elevada tasa de abandono escolar", remacha el informe.