Barcelona será la capital mundial del móvil hasta el 2018

«Hemos ganado otros Juegos Olímpicos». Agustín Cordón, Director General de Fira de Barcelona, se mostraba ayer radiante tras conocer la decisión de la GSMA, la entidad organizadora del Mobile World Congress. Tras una larga lucha con París, Múnich y Milán, Barcelona fue designada ayer capital mundial de la telefonía móvil entre el 2012 y el 2018, lo que implicará la celebración del Mobile World Congress pero también que la ciudad se convierta en el «referente mundial» de esta tecnología. Nuevas empresas vendrán a Barcelona, muchas otras se crearán, y las ya existentes pondrán en marcha proyectos relacionados con la telefonía móvil. El impacto económico será de alrededor de 3.500 millones de euros en todo el periodo, lo que «ayudará a salir de la crisis» y a «crear muchos puestos de trabajo», según aseguró ayer elpresidentArtur Mas.

Para Mas, la designación de Barcelona debe servir para inyectar una buena dosis de «moral colectiva al país» y para poner de manifiesto ante aquella «gente que se pueda sentir desencantada» con la crisis que golpea a Catalunya que, «si se trabaja juntos y bien, los éxitos llegan», aunque eso requiere «esfuerzos previos». Y puso como ejemplo a la Fira, que ha orquestado la candidatura catalana, junto a «instituciones pero también empresas privadas».

UNIÓN / Esta «unión» ha sido una de las claves del éxito de Barcelona, según Cordón. El trabajo conjunto de la misma Fira, el ayuntamiento, la Generalitat, el Ministerio de Industria, la Cámara de Comercio de Barcelona y Turisme de Barcelona, entre otras, además del apoyo de empresas privadas e instituciones como Telefónica y el FC Barcelona, han ayudado a «decantar la balanza» a favor de la candidatura catalana.

«Barcelona demostró que verdaderamente se merece el título de capital mundial del móvil por su combinación excepcional de feria de muestras e instalaciones para conferencias, su red de transportes e infraestructura hotelera, así como por su compromiso de ampliar el alcance de la movilidad en Barcelona, Catalunya y España, y el fuerte apoyo de los sectores público y privado», aseguró el consejero delegado de la GSMA, John Hoffman.

«Se ha ganado la carrera, pero cuando se triunfa se tiene que seguir entrenando para no perder la próxima carrera», dijo, eufórico, el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, quien remarcó el papel del anterior equipo del ayuntamiento y Govern en todo el proceso. «La ciudad afronta una situación inmejorable de cara al futuro», añadió.

HEREU Y MONTILLA / «Traerá un desarrollo extraordinario a nivel económico y social», agregó el presidente del consejo de administración de Fira, Josep Lluís Bonet. Además, se produjeron reacciones desde los anteriores equipos municipales y de Govern. El exalcalde de Barcelona y líder del PSC de la ciudad, Jordi Hereu, remarcó ayer que la designación «abre un nuevo escenario ecnonómico para la ciudad». «Es una muestra del buen trabajo que se hizo», dijo elexpresident José Montilla.

También se mostraron «eufóricas» las principales compañías de telefonía. «Hemos trabajado mucho. Barcelona se lo merece, y los ciudadanos verán que es una magnífica noticia para la economía, pero también para el día a día», aseguró el director general de Telefónica en Catalunya, Kim Faura. «Estamos muy satisfechos de que la feria continúe en Barcelona. La ciudad se vuelca con el congreso», señaló el presidente de Vodafone, Francisco Roman.

CIERRE DE CICLO / La designación de Barcelona cierra un ciclo que se inició en el 2005, cuando las autoridades catalanas se interesaron por el Mobile World Congress. Desde entonces, la organización ha visto como el congreso ha crecido año a año en Barcelona, hasta convertirse en el referente mundial. Es por ello que algunos directivos, como el mismo Hoffman, han establecido un «vínculo especial» con Catalunya. De hecho, el directivo se encuentra en Catalunya para pasar parte de sus vacaciones y, entre otras actividades, cenará este fin de semana en El Bulli. Pero no lo hará para festejar que el congreso se queda en Barcelona, sino para celebrar su cumpleaños (acudirá solo con su mujer).

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