El banquero de la pensión

José Ignacio Goirigolzarri Tellaeche (Bilbao, 1954) abandonó en el 2009 su cargo de consejero delegado del BBVA al saber que Francisco González alargaba su mandato de presidente hasta cumplir los 70 años, lo que alejaba sus aspiraciones de sustituirle. Los más de tres millones de euros al año que pactó Goirigolzarri en concepto de pensión fueron objeto de escándalo. El banco tenía un fondo de 52,49 millones provisionado para hacer frente al pago.

Políticos y sindicatos se sumaron a las críticas por lo elevado de la suma. Incluso Elena Salgado, entonces vicepresidenta económica, insinuó que era poco ético. Celestino Corbacho, que era ministro de Trabajo, exigió al BBVA que nunca diera consejos sobre abaratamiento de despidos, y el de Fomento, José Blanco, propuso que se gravara con una fiscalidad mayor. También desde el PP hubo rechazo, aunque moderado. Cristóbal Montoro, el actual ministro de Hacienda y que en el 2009 era el responsable económico del PP, consideró«especialmente llamativo»que el banco reservara tantos millones para pagar la pensión, y María Dolores de Cospedal, secretaria general de los populares, afirmó que era«complicado de explicar»dada la situación del país.

Al dejar el BBVA, creó la fundación Garum para fomentar el desarrollo de proyectos empresariales. Desde entonces, se ha especulado con su vuelta al sector financiero.

Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Deusto, también realizó estudios de Finanzas y Planificación Estratégica en la Universidad de Leeds (Reino Unido). Después de tres años como profesor de Planificación Estratégica en la Universidad de Deusto, ingresó en el Banco de Bilbao en 1978 como analista de planificación estratégica. Diez años después, formó parte de BBV-Holding, la sociedad que condujo la fusión del Banco de Bilbao con el Vizcaya.

Goirigolzarri fue responsable del éxito del Libretón, producto que captó 750.000 nuevos clientes con regalos y sorteos. Fue nombrado director general del BBV en 1992 y, tras el anuncio de fusión del BBV y Argentaria en 1999, miembro del comité de dirección de BBVA y responsable de Latinoamérica. El 18 de diciembre de 2001 se convirtió en el número dos, tras la marcha de Emilio Ybarra y Pedro Luis Uriarte, ambos imputados después en el caso de las cuentas secretas del BBV, que fue archivado por el juez.