Las turbulencias financieras

La banca española pasa los test de estrés sin sorpresas de última hora

Miguel Ángel Fernández Ordóñez

Miguel Ángel Fernández Ordóñez

P. ALLENDESALAZAR
MADRID

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La banca española ha superado unas pruebas de resistencia (stress test, en inglés) del sistema financiero europeo especialmente diseñadas para penalizarla. Solo cinco de las 25 entidades examinadas han suspendido según el resultado oficial, pero el Banco de España no les va a requerir más capital. Las autoridades españolas estaban ayer «casi celebrando» -según reconoció el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez- el «excelente» resultado, como lo calificó la vicepresidenta económica, Elena Salgado. Pero es un éxito, admitió el propio supervisor, que va a tener escasos efectos positivos a corto plazo.

La autoridad europea encargada de hacer los exámenes (EBA) publicó una nota oficial en la que no se tienen en cuenta elementos como las provisiones genéricas (la hucha que hacen las entidades en las épocas de bonanza para afrontar las pérdidas de los tiempo malos) ni las convertibles (títulos que se transforman en acciones pasado un tiempo).

Según ese criterio, y en un escenario económico imaginario mucho peor que el actual, cuatro cajas y cinco bancos no tendrían la solvencia que se ha fijado como mínima en las pruebas, un 5% de capital básico. Serían la CAM (3%), el gallego Banco Pastor (3,3%), Caja 3 (4%), Unnim (4,5%), y Catalunya Caixa (4,8%).

Sin embargo, teniendo en cuenta esos instrumentos de capital excluidos, todas las entidades aprueban. Es por ello que el Banco de España no les requerirá más capital. Eso sí, tres de las cajas pasan el examen gracias a que el Estado les inyectará capital de forma parcial y temporal: la CAM (recibirá 2.800 millones de ayuda pública), Catalunya Caixa (1.718 millones) y Unnim (568 millones).

SIN EFECTO / El problema es que la publicación de las pruebas del año pasado -en las que suspendieron cinco cajas- contribuyó a que la prima de riesgo (indicador de la posibilidad de impago de la deuda pública) bajase hasta los 140 puntos básicos, pero es improbable que se repita. De hecho, ayer escaló hasta los 347 puntos tras conocerse los datos, en un día en que el Ibex cayó el 1,19% antes de publicarse los resultados.

Muchos analistas han cuestionado la metodología de las pruebas por no tomar en consideración una posible quiebra de Grecia. Pero es que además, la banca no aparece ahora como la preocupación principal. «La prima de riesgo no tiene nada que ver en estos momentos con lo que haga un país, sino con la incapacidad de Europa para solucionar un problema de un país que pesa el 2% (Grecia)», criticó Ordóñez.

El gobernador se arrogó el éxito: «Lo que está haciendo el Banco de España ha dado lugar a que el resultado sea el esperado». Con todo, advirtió de que la reestructuración que ha liderado no incrementará el crédito cuando se culmine en otoño. No volverá, advirtió al Gobierno, hasta que se tomen «medidas económicas importantes» que devuelvan el crecimiento.

Salgado coincidió con él en que «la volatilidad de los mercados no tiene que ver con España, sino con la falta de respuesta a los problemas de Grecia». Pero se distanció de sus críticas a Europa: «Es verdad que podríamos actuar con más agilidad y que de eso se trata, pero no hay que minimizar los problemas a los que nos enfrentamos», informa Rosa M. Sánchez.

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