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Arrom, los reyes del atún

Josep Comas Arrom, de la firma especializada en atún Arrom.

Josep Comas Arrom, de la firma especializada en atún Arrom. / periodico

Josep M. Berengueras / Barcelona

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De la venta ambulante de pescado a liderar la distribución de atún en España. Es la historia de Arrom, una compañía catalana en plena expansión dedicada a la distribución y venta de  pescado, que el año pasado logró duplicar la facturación, hasta los 20 millones de euros. Este año prevé crecer al menos otro 20%, hasta 24 millones.

La familia Arrom probó suerte en época de posguerra en el negocio de la venta ambulante de pescado. Después abrieron una parada de pescado en el mercado de Santa Caterina, que aún hoy en día regentan los padres de Josep Comas Arrom, actual director general de la compañía Arrom. Este empezó a trabajar con 14 años en el sector, a aprender el oficio, pero sus inquietudes iban más allá de servir al cliente en la parada. «Empecé a ver que había otras oportunidades. Por ejemplo, por qué no ir a buscar a los clientes, es decir, ir a conseguir que restaurantes nos compraran y llevarles nosotros el pescado», comenta. Fue el germen de la actual Arrom: venta y distribución de pescado a restaurantes, mayoristas, pescaderías y distribuidores.  La pescadería de venta al detalle sigue también en marcha.

La empresa se ha especializado en la venta y distribución de atún, que representa entre el 60% y el 70% del negocio. Según la firma, lidera la distribución de este tipo de pescado y de salmón en España, con cuatro toneladas al día de atún y otras cuatro de salmón a la jornada.

La firma trabaja «con los mejores productores» y empresas de pesca de aún, y se ha especializado en el atún bluefin -rojo- , la yellowfin y el big eye, las más cotizadas por la hostelería. «Prácticamente todos los restaurantes con estrella Michelin de Barcelona son clientes», señala el directivo. Importa pescado de Japón, Maldivas, Alaska, Corea del Sur y Sri Lanka, entre otros mercados, con acuerdos de exclusividad como el del hamachi (seriola) japonés.

La firma cuenta una nave de distribución en Viladecans, y desde el año pasado con otro espacio en Mercabarna, donde adquirió una empresa por un millón de euros y donde manipula el pescado y realiza ventas. Esta compra ha permitido ampliar el número de clientes y alcanzar los 20 millones de euros de facturación. La firma tiene 40 trabajadores.

En sus planes está ampliar la presencia en Mercabarna, donde ha solicitado una nave de la futura ampliación del mercado, donde prevé invertir dos millones de euros. Ello le permitiría agregar nuevas líneas de negocio: la congelación y venta de atún y las conservas.

«Nuestra filosofía es cuidar mucho al cliente y darle el producto de más calidad», concluye.