Alemania aprueba una regulación bancaria que contempla la cárcel para directivos

Los ejecutivos podrán ser demandados por vía penal si llevan a sus empresas a situaciones de riesgo

J. M. FRAU / Berlín

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ElGobierno alemán aprobó hoy una estricta regulación de las entidades financieras que contemplacondenas de hasta cinco años de cárcel para quienesaprueben inversiones de riesgo que acaben en fiasco. El proyecto de ley, que deberá ser ahora ratificado por el Bundestag (cámara baja), establece que los altos ejecutivos bancarios y de compañías aseguradoras podrán ser demandados por la vía penal si llevan a sus empresas a una situación crítica por incumplir sus obligaciones en la gestión de productos de alto riesgo.

"Ningún mercado financiero, ningún actor financiero y ningún producto financiero pueden quedar desatendidos . Por lo tanto, paso a paso vamos creando un nuevo marco para regular los mercados financieros”. Son palabras del ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble al valorar el proyecto de ley de regulación bancaria que ha aprobado el Consejo de Ministros.

El nuevo marco de regulación financiera pretende ser una herramienta para la detección de riesgos y la planificación de la rehabilitación y liquidación de entidades de crédito y grupos financieros. El Gobierno de Angela Merkel considera que el establecimiento de penas para los directivos de entidades puede ayudar a prevenir futuras crisis así como su impacto en la sociedad y la economía del país. La nueva norma establece que los propios bancos dispongan de un plan de saneamiento para prevenir posibles crisis

El proyecto de ley obliga también a separar la banca de inversión de la comercial para evitar que los particulares puedan sufrir pérdidas a consecuencia de las operaciones de riesgo de las entidades. En concreto, si los activos de riesgo superan el 20% del total o los 100.000 millones de euros, los bancos o las aseguradoras estarán obligados a la creación de empresas independientes para gestionar estos activos y defender así el negocio comercial. Esta idea fue propuesta el pasado mes de octubre por el gobernador del Banco de Finlandia, Erkki Liikanen, en un informe que fue remitido a la Comisión Europea.

Según las previsiones del Gobierno, la nueva ley debería entrar en vigor en enero del 2014. Sin embargo, no es asegura su aprobación en el Bundesrat, al no contar con mayoría la CDU de Merkel.