Abertis aboga por elevar la velocidad en autopistas a 140 km por hora

El consejero delegado de Abertis, Francisco Reynés, consideró ayer que la velocidad máxima de circulación de las autopistas podría elevarse hasta los 140 kilómetros por hora sin que ello supusiera un aumento de la siniestralidad dadas las condiciones de las vías españolas y del parque automovilístico. «Las autopistas están preparadas para circular a más de 110 kilómetros por hora. Hay otros países de Europa con otros límites de velocidad y no han registrado un aumento de la siniestralidad», indicó Reynés en la rueda de prensa para la presentación de los resultados obtenidos por la compañía en el primer trimestre del 2011.

La limitación de la velocidad máxima a 110 kilómetros por hora fue impuesta por el Gobierno en marzo (en principio, hasta el 30 de junio) como medida de ahorro de combustible. Ya entonces, el presidente de la patronal de la construcción Seopán, David Taguas, advirtió de que ello iba a suponer un menor uso de las autopistas de peaje.

En el primer trimestre del año, Abertis registró un descenso del 5,5% en el tráfico medio de sus peajes en España. Aunque Reynés relacionó el dato con la estacionalidad adversa del primer trimestre del 2011 (por el desplazamiento a abril de la Semana Santa) y con el incremento del precio del carburante (que ha reducido el uso del automóvil), no desaprovechó la ocasión para defender un aumento sustancial de la velocidad máxima en las autopistas que, de paso, aumentaría el atractivo de circular por las vías de peaje.

El menor tráfico en las autopistas españolas contrasta con el aumento del 3,8% en los peajes que Abertis gestiona a través de Sanef en Francia, un país donde la recuperación económica va por delante.

MÁS BENEFICIO Y MENOS DEUDA / Los resultados de Abertis incluyen un beneficio neto consolidado de 275 millones en el primer trimestre. El aumento «estratosférico» -en expresión de Reynés- del 130,8% respecto a igual periodo del 2010 se explica por las plusvalías por la venta de Atlantia. En cifras comparables, el beneficio obtenido por la compañía participada por La Caixa fue de 124 millones, con un incremento del 4,1% «muy respetable y muy importante», según el consejero delegado.

El 75% del beneficio del primer trimestre se ha destinado a reducir deuda, siguiendo la estrategia iniciada en el 2010 y encaminada a sanear el balance para preparar la compañía ante próximas adquisiciones. Según Reynés, la necesidad de los países de reducir sus déficits abre oportunidades a empresas concesionarias como Abertis. No obstante el 2011 «puede que aún no sea un año de proyectos» por ser un ejercicio «preelectoral en muchos países» como EEUU, citó.