Los cambios en el sector financiero

La Caixa explora convertirse en un banco en el primer trimestre del 2011

PABLO ALLENDESALAZAR MADRID
OLGA GRAU / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Caixa ha encabezado las transformaciones del sector del ahorro desde hace décadas y quiere seguir ocupando ese puesto de liderazgo en la reordenación más relevante de las finanzas españolas. La entidad presidida por Isidre Fainé está estudiando operar mediante una «gestión indirecta», a través de un banco de su propiedad, según han confirmado a EL PERIÓDICO fuentes cercanas a la operación. La decisión final se tomará el próximo enero, para ir luego desarrollando los distintos trámites de la operación a lo largo del primer trimestre.

La opción, barajada por la entidad desde hace tiempo, está contemplada por la nueva ley de cajas, aprobada por el Gobierno el pasado verano y auspiciada y negociada por el propio Fainé en su condición de presidente de la patronal del sector, la CECA. La norma permite traspasar todo el negocio financiero de la caja a un banco, del que la entidad sería en un principio el único accionista. De confirmarse la operación tal y como está hoy planteándose, Criteria, el hólding de participadas de La Caixa, dependería orgánicamente del banco, no de la caja.

REPRESENTACIÓN / Si posteriormente va dando entrada a otros inversores (bien de forma directa, bien a través de una hipotética salida a bolsa), la entidad podría mantener su condición de caja siempre que conservase más de la mitad del capital. También podría convertirse en una fundación de forma voluntaria (una opción bien vista), u obligatoria, si baja del 50% de las acciones.

Esta fundación, en la que estarían presentes los grupos de interés actualmente representados en la caja, se dedicaría a gestionar la obra social con los dividendos obtenidos por la participación en el banco y sería la encargada de garantizar la pervivencia de los principios fundadores de la entidad.

La caja catalana está sopesando dar este paso al frente para tomar la iniciativa ante un futuro que va a ser radicalmente distinto para las cajas. Los nuevos requisitos internacionales de capital y liquidez, conocidos como Basilea III, van a obligar a las entidades a captar una cantidad ingente de recursos externos de forma escalonada hasta el 2019, algo sumamente complejo para las cajas en su configuración actual (no tienen accionistas) y ante la brutal aversión al riego de los inversores. No sería así para un banco, sobre todo del tamaño y la solvencia de La Caixa.

OPCIÓN RECOMENDADA / De hecho, el Banco de España, que vería bien la operación, está empujando al resto de cajas a crear bancos, a pesar de que la ley permite otras opciones, como emitir cuotas participativas (una especie de acciones). Entiende que esta segunda opción, sin paralelo en el mundo, sería rechazada por los inversores. Hasta ahora, el supervisor admite que los administradores compartan cargo en la caja y su banco, pero no así los directivos.

La apuesta de La Caixa de convertirse en banco no ha pasado todavía por el consejo de administración de la entidad y se encuentra todavía en discusión por parte de la dirección de la entidad. Si la decisión termina por precipitarse a principios de año, se requeriría la convocatoria de un consejo de administración extraordinario, ya que el último antes de las vacaciones de Navidad se realizó el pasado jueves. La caja presentará sus resultados a finales del mes de enero.

En los últimos meses, La Caixa ha estudiado diversas opciones para afrontar Basilea III. Una que ha explorado para ganar tamaño es la compra de un banco en España, aunque por el momento ha quedado descartado. Se han barajado la fusión con el Sabadell o el Popular. La primera se descartó por las dificultades que comportaría una operación entre dos grupos con fuerte presencia en Catalunya.