Los partidos dejan en manos del Gobierno retrasar la jubilación

Definitivamente, las conclusiones de la comisión del Pacto de Toledo no incluirán ninguna referencia a la edad legal de jubilación y será el Gobierno el que decida mantener o no su propuesta de que el retiro se fije en los 67 años en el proyecto de ley que envíe en enero al Parlamento. Las brechas sobre esta cuestión entre el PSOE y los partidos de la oposición con los que cuenta para aprobar las conclusiones -PP, CiU, PNV y CC—obligaron ayer durante la reunión de la ponencia que debe redactar las recomendaciones a hacer un difícil equilibrio hasta llegar a pactar los desacuerdos.

La diputada socialista Isabel López Chamosa retiró la propuesta del Gobierno de prolongar la edad de jubilación de 65 a 67 años, en aras del acuerdo, sobre todo, ante la negativa unánime de toda la oposición de que figure una edad concreta. Tomas Burgos, del PP, contraatacó con una propuesta para que se subrayara que la edad legal de jubilación sea los 65.

Ante este debate, en el que se emplearon varias horas, el representante de CiU, Carles Campuzano, ofreció una solución que permite a la oposición -excepto la izquierda que representan IU-IC, ERC y BNG—defender públicamente y al mismo tiempo, el acuerdo futuro del Pacto de Toledo y sus posiciones políticas.

Pese a esta redacción poca concreta, el ministro de Trabajo Valeriano Gómez destacó la gran «identidad» de las futuras conclusiones de la comisión con el documento remitido por el Gobierno el 29 de enero pasado. El titular de Trabajo señaló asímismo que continuarán haciendo el «máximo esfuerzo» para que el planteamiento del Ejecutivo de elevar el retiro a los 67 años sea compatible con las conclusiones del Pacto de Toledo e indicó que seguirán negociando con los partidos políticos y los agentes sociales en enero.

No obstante, donde sí hay consenso es en acercar la edad real de jubilación, actualmente cercana a los 63 años, a la edad legal de los 65, e incentivar la voluntariedad de los ciudadanos a prolongar su vida laboral más allá de esa edad. Además, se acordó dificultar las prejubilaciones para que no se utilicen como fórmula de ajuste empresarial.

La Comisión del Pacto de Toledo también alcanzó hoy un acuerdo sobre la ampliación en la base reguladora de la pensión de viudedad para personas mayores de 65 años cuyo principal fuente de ingreso sea esa pensión.

Todos los grupos que componen la comisión apoyaron esta recomendación que será ampliada en la próxima reunión que mantendrán el martes que viene, cuando también se debatirá la posibilidad de elevar la edad para cobrar la prestación por orfandad.

El miércoles, la comisión ya acordó elevar el periodo de cotización para el cálculo de la pensión, pero sin fijar un periodo concreto. Actualmente, se contabilizan los últimos quince años de la vida laboral y un aumento supondría una merma de la prestación de los futuros jubilados.