El futuro del negocio aeroportuario

La demanda de vuelos de larga distancia dobla la oferta en BCN

SALVADOR SABRIÀ
BARCELONA

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Los últimos anuncios de Spanair y de Iberia de la inminente puesta en marcha de sendos vuelos directos de Barcelona a Sao Paulo constatan que el potencial del aeropuerto de El Prat en rutas intercontinentales vuelve a interesar a las aerolíneas en el momento en el que el negocio aeroportuario empieza a salir de la crisis. Un potencial que se expresa con cifras contundentes: la demanda de vuelos directos desde Barcelona a otros continentes prácticamente duplica a la oferta actual de rutas directas que se ofrecen desde El Prat a esos destinos.

En el 2009, el tránsito intercontinental con origen o destino en Barcelona movió a 3,49 millones de pasajeros, de los que solo 1,62 millones lo hicieron mediante los vuelos directos que se ofrecen en El Prat. El resto volaron realizando escalas y conexiones en otros aeropuertos. El primero de estoshubsfue Barajas, con una cuota del 30%, pero el 70% restante utilizó otros aeropuertos europeos (París, Londres y Amsterdam, entre otros).

LATINOAMÉRICA Y ASIA / Con el cruce de los datos de las ciudades de salida de los pasajeros con los de sus destinos finales un estudio de Spanair llega a la conclusión de que hay suficiente demanda con el tráfico del área de Barcelona para hacer rentables vuelos a Buenos Aires, México y Nueva York. Y que también son rentables punto a punto rutas a Tokio, Sao Paulo, Lima, Bogotá, Ecuador y Caracas si se puede disponer de vuelos de conexión procedentes de otros aeropuertos españoles o europeos que permitirían llenar los aviones de larga distancia.

También tendrían salida los destinos asiáticos de Pekín, Shanhái o Delhi, pero su coste es más elevado y las conexiones deberían ser mayores.

La rápida respuesta de Iberia al previo anuncio de su competidora, recuperando vuelos de largo radio desde El Prat a Sao Paulo y a Miami y rompiendo así con la línea estratégica que inició en esta compañía en el 2006 es otra demostración del creciente interés por las rutas intercontinentales desde Barcelona.

Sin embargo, el objetivo de convertir El Prat en un hub, compartido por la Generalitat y la mayoría de instituciones empresariales y sociales de Catalunya, puede ser mucho más difícil de lograr tras la irrupción de Ryanair en Barcelona y el auge de las compañías de bajo coste en general que solo vuelan punto a punto y no realizan conexiones con otros vuelos de larga distancia.

Aunque laslow costincrementan el número de usuarios de El Prat, lo hacen en muchos casos a costa de los clientes de otras compañías que sí que realizan vuelos de conexión y que ahora pueden dejar de ofrecerlos por que les faltará masa crítica. Los vuelos de conexión son mucho más caros y complicados de organizar que los que unen solo punto a punto y cuyas empresas no asumen ninguna responsabilidad con el pasajero si este intenta unir dos rutas. Por todo ello, el incremento del bajo coste en El Prat es visto por muchos expertos como un peligro a medio y largo plazo.

Así lo destaca el director del Gabinet d'Infraestructuras y Territori de la Cámara de Comercio de Barcelona, Salvador Corcoll: «El modelo de bajo coste, liderado por la apuesta muy agresiva en precio de Ryanair, puede orientar la actividad del aeropuerto hacia una línea que no era la que deseaban las instituciones del país».

SPANAIR Y STAR ALLIANCE / Una de las aeroíneas que está invirtiendo más para ampliar la conectividad de Barcelona es Spanair, entre otros motivos porque sus directivos consideran que la compañía solo logrará entrar en números negros si puede llegar a ofrecer vuelos intercontinentales, que son los más rentables. Para ello está incrementando las rutas internas que aportan pasajeros a los vuelos de larga distancia que ya ofrecen las aerolíneas de su alianza Star Alliance, como Singapore Airlines o Air Canadá, entre otras. Entre los proyectos más inmediatos, la aerolínea prevé abrir en noviembre un vuelo a Nueva York con código compartido con Continental.