informe de la universidad complutense sobre la brecha digital

La mujer halla más obstáculos para usar tecnología avanzada

SONIA GUTIÉRREZ / Barcelona

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Sobre el papel, todos los ciudadanos, hombres y mujeres, son capaces de operar con la banca electrónica, jugar a videojuegos en red con otros amigos o consultar ele-mailen el móvil. No hay ninguna ley escrita en España que impida a la mujer, por el mero hecho de serlo, acceder a la tecnología avanzada. Pero la práctica demuestra que ellas están un paso por detrás cuando se trata de usos que van más allá de navegar por internet, chatear o consultar el correo electrónico en el PC. La situación laboral es, según los expertos, uno de los motivos que explican esta desigualdad tecnológica.

Un informe elaborado por el Observatorio de E-Igualdad de la Universidad Complutense de Madrid constata que, aunque la brecha digital entre hombres y mujeres se ha reducido en los últimos años, si se miran en detalle las estadísticas, hay señales de alerta para el futuro.

«A mayor intensidad tecnológica y mayor valor añadido, la brecha es más grande», explica Juan Martín Fernández, coordinador del estudioLa brecha digital de género: amantes y distantes, correspondiente al 2007-2009. Por ejemplo, apenas hay diferencias en ele-mail, donde la brecha digital (calculada con una fórmula matemática) es del -0,4. Pero cuando se habla de la descarga de películas de internet, la diferencia aumenta al -21,2. Una de las mayores desigualdades entre sexos se da en el uso de móviles de banda ancha (-45,5).

La explicación para Cecilia Castaño, directora del Observatorio de

E-Igualdad de la Universidad Complutense, es tan simple como alarmante: ellas se van «desenganchando» de la tecnología conforme relegan su carrera profesional a un segundo plano para cuidar de la familia. No es que la situación laboral afecte solo a las mujeres como factor de exclusión (también los hombres en paro usan menos el ordenador que los que trabajan), pero son ellas las que renuncian más a su promoción laboral y son minoría en los consejos directivos de las empresas. Las amas de casa navegan por internet, pero no suelen estar conectadas alsmartphonetodo el día.

«Esto tiene consecuencias muy importantes. Ahora se está hablando de cambiar a un modelo productivo de alta cualificación tecnológica, y existe el riesgo de que las mujeres no puedan aportar su creatividad a este nuevo modelo», adiverte Castaño. «Se está perdiendo un importante potencial productivo», corrobora Martín.

El informe analiza otros factores que pueden alejar a las personas de la tecnología, como tener una edad avanzada o un nivel bajo de estudios. Estos factores afectan tanto a hombres como a mujeres, pero no por igual: ellas salen casi siempre peor paradas. En parte, es efecto de los estereotipos y las «microdiscriminaciones» de la vida cotidiana.

MÁRKETING SIN DISTINCIÓN / Las empresas tecnológicas aseguran que el sexo no es un factor determinante en su sector y que no hacen distinciones entre sus clientes según si son hombres o mujeres, aunque admiten que unos y otras se decantan por contenidos o usos diferentes.

«Es verdad que hace un año había una mayor diferencia entre hombres y mujeres, pero ahora lo que más discrimina es la edad», afirma Reyes Justribó, directora de Márketing de Nokia Iberia. La compañía tenía hace tiempo una gama de móviles con una estética dirigida a mujeres, que dejó de fabricar hace años.

Telefónica, que asegura que su publicidad no hace distinciones por sexo, coincide en que la penetración del móvil es casi la misma en ambos casos, superior al 85%. No obstante, las mujeres están menos familiarizadas con internet en el móvil. Según la operadora, en el último año han crecido mucho las usuarias de PDA y Blackberry, por lo que calcula que las cifras se irán igualando.

Fernando Carrión, responsable de investigación para productos de Microsoft, opina que «no es tan importante la segmentación por sexo o edad, sino el momento vital, la trayectoria personal». Eso, remarca, «es extrapolable a los hombres». La política de márketing de la compañía es igual para hombres y mujeres, aunque hay excepciones, como la relativa a la consola Xbox, en los que sí se centran más en los chicos.