Una entidad centenaria con alma obrera

Elegantes mesas de mármol en una concurrida y acogedora cafetería, una sala de lectura y otra de ajedrez, billar, escenario, pista de baile y un histórico piano negro de 1930. Estos son algunos de los espacios y elementos que alberga la entidad más antigua de Barcelona: el emblemático Ateneu Hortenc, fundado en 1863.

La institución, que en 1877 recibía el nombre de Círculo Hortense, pasó a llamarse Ateneo Obrero Hortense cuando el pueblo de Sant Joan de Horta fue anexionado a Barcelona. Por aquel entonces, el Ateneu era el lugar de reunión de los trabajadores de la zona que pasaban allí sus horas de ocio, momentos de recreo que compartían de forma colectiva. Fue entre 1925 y 1926 cuando la entidad se mudó al actual edificio y otra vez volvió a ser rebautizada. La dictadura franquista motivó que la entidad pasara a denominarse Ateneu Cultural Hortense. Ya en 1942 el término Cultural despareció de su nombre y así se mantenido hasta ahora.

Espacio cultural

El centro cumplirá 150 años en el 2013. «Esperamos llegar con mucha fuerza al aniversario del Ateneu», explica el actual presidente de la entidad, Enric Ferrer, con el runrún de fondo de la cafetería de la entidad. Ferrer cuenta que el pimpón, la gimnasia, los juegos de mesa, el ajedrez, las sevillanas, el teatro, el baile y las excursiones son algunas de las actividades que se realizan en el seno del Ateneu Hortenc.

El vicepresidente de la entidad, Ferran Isern, apunta que el deseo de los socios es que haya más jóvenes en el centro. «Se ha perdido la costumbre de que la gente joven se reúna en este tipo de entidades. Ahora buscan el ocio en otros lugares», afirma.

El año pasado, el Ateneu recibió el premio Racons Públics del FAD por el moderno diseño de su pared medianera. La obra con un curioso diseño de letras y relieves llamó la atención del presidente. «Me dijeron que representaba que las letras caen del cielo», asegura sonriente Enric Ferrer.

Esta institución centenaria siempre ha estado vinculada muy estrechamente a la vida cultural del barrio. «Tenemos el orgullo de contar con la Orquesta Els Montgrins desde hace más de 20 años», apunta Joan Robert, vocal del Ateneu.

Las instalaciones navegan entre el pasado y la modernidad. «El escenario y la pista de baile fueron remodelados hace unos cinco años», afirma Ferrer. Pero el presidente considera que sería necesario un ascensor de acceso al primer piso para que lo utilicen las personas que tienen problemas de movilidad.

Cada año tres entidades hortenses de peso colaboran en el Caliu Màgic, una iniciativa solidaria. Lluïsos d'Horta, Foment Hortenc y Ateneu Hortenc organizan espectáculos de magia para recoger alimentos y donativos y entregarlos a los más desfavorecidos.

La entidad, que ha visto rejuvenecer el aspecto físico de su sede gracias al moderno diseño de la pared medianera, tiene una fachada muy antigua. «Ahora está en mal estado porque no se ha reformado», puntualiza el presidente del Ateneu.

Los premios recibidos son otro de los motivos que llenan de orgullo a los 200 socios que tiene ahora la entidad. Esta veterana asociación recibió en 1997 la medalla de oro de Barcelona, y cinco años más tarde, la Creu de Sant Jordi.