un vecino llamado... Joan López, cofundador del Circo Rogelio Rivel y creador de Desastrosus Cirkus

"En Nou Barris todo se ha logrado con la lucha vecinal"

<b>Crear espectáculos para todos los públicos </b>es el cometido de la compañía Desastrosus Cirkus, que el artista y profesor de circo Joan López puso en marcha en 1989. Unos sencillos malabares hicieron brotar su mundo circense, una disciplina que late con fuerza Nou Barris

Lugar clave Telas y cintas para la magia circenseLA FAMILIA MARTÍN PÉREZ REGENTA DESDE HACE 42 AÑOS EL IMAN, LA TIENDA DE RETALES Y TEJIDOS DEL 155 DE VIA JÚLIA DONDE COMPRA JOAN LÓPEZ.

Lugar clave Telas y cintas para la magia circenseLA FAMILIA MARTÍN PÉREZ REGENTA DESDE HACE 42 AÑOS EL IMAN, LA TIENDA DE RETALES Y TEJIDOS DEL 155 DE VIA JÚLIA DONDE COMPRA JOAN LÓPEZ.

CARME ESCALES
BARCELONA

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Tres árboles frutales (un limonero, un naranjo y un cerezo) crecen en el parque del Pla de Fornells, en la Trinitat Nova, junto a la carpa del Circo Rogelio Rivel, recordando a tres artistas que bajo el gran entoldado habían hecho sus espectáculos de clown, acrobacia y saltos aéreos.«Elsa Moreno fue alumna de Rogelio Rivel y a mí me enseñó acrobacia. Joan Armengol fue uno de los fundadores de Comediants y aquí impartía clases de clown. Y a Sol, una alumna chilena que hacía aéreos con telas, le dedicamos el naranjo», explica el profesor de circo Joan López, una de las personas vinculadas a la escuela de circo del Ateneu de Nou Barris desde que era solo una idea piloto.

«Como la mayoría de cosas que se han hecho en el distrito, también el circo tuvo sus inicios en las calles de Nou Barris», apunta López.«Primero fuimos totalmente autodidactas. Con tres juegos malabares, un monociclo y unos zancos, montamos un pequeño grupo de animación. Éramos todos de Nou Barris. Había, incluso, una pareja que tenía un trapecio. Teníamos un pequeño grupo de percusión que iba por la calle anunciando nuestro espectáculo en el Ateneu», recuerda López.

Desde Nou Barris, Joan López y multitud de vecinos habían ido hasta la plaza de Sant Jaume a expresar públicamente sus demandas para sus barrios. Y una de ellas fue la petición de una carpa de circo.«Con estructuras de trapecio y colchonetas, un grupo de padres y madres de Nou Barris nos fuimos a la plaza de Sant Jaume a pedir dinero para comprar una carpa de segunda mano, y lo conseguimos. La carpa llegó en un remolque desde Francia»,explica.

Semilla de la escuela

Aquella fue la semilla de la escuela de circo de Catalunya.«De diferentes lugares de Europa llegaba gente del circo en caravanas y, como en el Ateneu teníamos duchas, compartíamos técnicas. Aprendíamos unos de otros»,relata el profesor, que desde el inicio hasta hoy ha vivido su dedicación profesional como un reto social.«En la escuela infantil y juvenil de circo del Ateneu, además de los cursosabiertos a todo el público, de entre 6 años y hasta los 17, también trabajamos técnicas circenses -14, entre ellas acrobacia, equilibro y teatro- con grupos de fracaso escolar, con chicos y chicas de colectivos en riesgo de marginación social, y discapacitados», detalla.

Él conoce bien la tierra y el asfalto de calles y plazas del distrito al que llegó, cuando tenía 12 años, con sus padres (originarios de Albacete) y sus seis hermanos -él es el mayor de todos-, cuando a su padre, trabajador ferroviario, Renfe le cambió el destino, de Girona a Barcelona.«Cuando llegamos, en el 70, esto era el fin del mundo. La mayoría de calles no estaban asfaltadas, y no había alcantarillado. Eso sí, los bloques de pisos empezaron a levantarse rápidamente», cuenta.

«Recuerdo que querían cobrar las obras de asfaltado y alcantarillado a los vecinos y, cuando veíamos las máquinas llegar para asfaltar, nos plantábamos delante para que no pudieran empezar hasta que no retiraran el impuesto a los vecinos. En Nou Barris, todo se ha logrado por la lucha vecinal: semáforos, espacios verdes... Tenemos fotos apoteósicas de las persecuciones de los grisesen estas calles»,añade el vecino, fundador y miembro de Desastrosus Cirkus, la compañía que actuará el 12 de julio en la plaza del Rellotge de Santa Coloma de Gramenet (12 h.).

Una vida intensa

«En el 77 destrozamos la fábrica de asfalto que el ayuntamiento construyó donde hoy está la escuela de circo y el Ateneu. Todavía se pueden ver restos de alquitrán de los bidones que había, y por eso la asociación que gestiona ahora el Ateneu se llama El Bidó de Nou Barris. De la fábrica salían fumatas negras que ensuciaban la ropa tendida en los balcones. Cuando aún nadie hablaba de contaminación, en el barrio ya teníamos pancartas contra ella», rememora Joan López, más conocido en Nou Barris como Juanillo.

Este vecino reconoce haber vivido«intensamenteen este distrito quese ha ido levantando desde la calle»,afirma.«Todavía me acuerdo, hace 35 años, cuando instauramos la primera fiesta mayor en La Prosperitat. Teníamos un encargado de conectar los cables de la luz de las farolas a los equipos de sonido de los músicos, en la plaza Verda, en la que logramos que no se construyera, también después de muchas reivindicaciones. En ella plantamos los primeros tres pinos»,recuerda el fundador de Desastrosus Cirkus.

Como muchos de sus compañeros de escuela -de la oficial y de esa escuela que es la calle- Juanillo tiene historias para parar un tren como los que reparaban los trabajadores de Renfe que, como su padre, un día fueron destinados a este distrito de Barcelona.