CICLISMO. LA VOLTA 2015

Valverde gana y Contador pierde a su director

El ciclista murciano sorprende con un triunfo al esprint el día en que apartan a Riis del Tinkoff

Valverde levanta los brazos tras superar en los últimos metros a Rojas, su compañero en Movistar, en Olot.

Valverde levanta los brazos tras superar en los últimos metros a Rojas, su compañero en Movistar, en Olot.

SERGI LÓPEZ-EGEA
OLOT

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hay que tener un alma ciclista especial para ser como Alejandro Valverde. «Es un genio», repetía feliz, en el autocar del Movistar, José Luis Arrieta, su director en la Volta, contento también por la segunda plaza de José Joaquín Rojas Rojillas, en Olot. Valverde ganó al esprint, al más puro estilo de Mark Cavendish, como un velocista, como solo él es capaz de hacerlo, el único que vence en montaña, en clásicas y, en Catalunya, en una llegada masiva. Tan sorprendente como real.

Y hay que tener paciencia, contar hasta tres y morderse la lengua para ser como Alberto Contador, quizá la figura mundial (si se buscan antepasados solo se encuentra a Luis Ocaña) con suerte más esquiva a la hora de escoger equipos, tantas veces, sin venirle a cuento, en el conjunto y en el lado equivocado: Manolo Saiz (el que lo metió, sin estar, en la operación Puerto), Johan Bruyneel (el que le fichó a Lance Armstrong cuando él era el jefe de filas y el aspirante al Tour del 2009, que ganó) y ahora Oleg Tinkov, un excéntrico millonario ruso, al que le encanta hacer las etapas del Tour en bici y algunas noches, sin esconder su pasión por la buena bebida, jugar con su cuenta personal de twitter.

BROMAS EN META / Si Valverde ganaba al esprint, su segundo triunfo del año, sin acordarse de cuándo lo había hecho por última vez, «tal vez de juvenil», bromeaba en meta, Contador tragaba saliva en su hotel de Calella, cuando leía el comunicado emitido por el propietario de su equipo, según el cual apartaba de la dirección técnica del mismo a Bjarne Riis. En Mataró, en la salida, no escondía la desilusión por la medida. «Riis es una persona muy importante en mi carrera deportiva», dijo. Riis es el técnico con el que mejor se ha entendido el corredor madrileño. Son acontecimientos que poco a poco evocan a Contador a finiquitar pronto su carrera deportiva; no más allá de finales del 2016.

Corre en la Volta, sin estar a gusto, porque el recorrido no le atrae. Y porque Tinkov ya es más técnico que patrón, tras discusiones airadas en Italia (Tirreno-Adriático y Milán San Remo) con Riis, que han precipitado la medida disciplinaria del técnico danés y ganador del Tour de 1997.

En cambio, Valverde se sintió dichoso ayer. Hasta el punto de que quiso abrazar a su joven compañero catalán, Marc Soler, que llegaba rezagado, antes de subir al podio a recibir los premios. Soler, con apenas 21 años, es la gran promesa catalana del Movistar, quien ha hecho en Catalunya su debut en una carrera del circuito World Tour y que, como es lógico, sufre en los kilómetros finales. Él corre la Volta para aprender.

A Contador, el que no pone excusas aunque no le guste un planteamiento deportivo, le aguarda ahora la incertidumbre. ¿Quién le dirigirá en el Giro y el Tour? ¿Quién le guiará en su objetivo de conseguir un doblete que no ve imposible? Riis, en otoño, se llevó a todo el equipo al Kilimanjaro. Escalaron a pie el monte africano. A Tinkov no le gustó la iniciativa hasta el punto de que los malos resultados de su equipo, en el inicio de esta temporada, los atribuye al desgaste por la excursión.

Hoy, en  Girona, el Alt dels Àngels, complicado de subir y de bajar, animará una Volta en la que el polaco Maciej Paterski se mantiene de líder con Pierre Rolland, segundo.