Valentino Rossi: "Tengo muy claro que no seré eterno"

Emilio Pérez de Rozas entrevista a uno de los referentes del campeonato mundial de motociclismo. 'El Doctor' lleva 20 años en el Mundial y sigue queriendo acumular éxitos

Entrevista a Valentino Rossi

Entrevista a Valentino Rossi / periodico

EMILIO PÉREZ DE ROZAS / ASSEN (Enviado especial)

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Uno intuye que a Valentino Rossi (Tavullia, Pesaro, 16 de febrero de 1979) le ocurre lo mismo que a Pep Guardiola, que el otro día reconoció en Manresa que lo único que persigue en esta vida, dentro y fuera del deporte, "es que me quieran; no busco ganar, ni acumular título, ni ser un líder, busco que me quieran".

Si algo ha dejado el 'Doctor' a lo largo de los 20 años que lleva en el Mundial es un reguero de cariño. Su presencia solo produce bienestar, buen rollo, complicidad, admiración. Ha ganado casi tanto como el que más (110 victorias en 319 carreras), se ha subido al podio en el 75% de las carreras (203) que ha corrido y acumula ya nueve títulos del mundo. Tiene saciada su gloria, pero él quiere seguir acumulando kilos, toneladas, de cariño, de admiración.

-Se le ve reluciente, optimista, en forma. Ha decidido conquistar su décimo título a los 36 años y no parece dispuesto a claudicar.

--Lo dije al concluir la pasada temporada: aún me siento competitivo y estos chicos han añadido una motivación más a mi carrera. Sí, quiero ganar más títulos. Estoy muy contento de cómo está yendo la temporada. Para Yamaha está siendo verdaderamente bonita. Jorge y yo, que al principio tuvimos problemas, lideramos el Mundial con un buen margen de puntos sobre el resto y los dos estamos haciendo grandes carreras. Además, estamos muy contentos de las sensaciones que nos transmite la moto. No podemos pararnos ahora.

-Los inicios con Lorenzo en el box de Yahama fueron tensos, sí.--Bueno, todo el mundo sabe que no me gustó que Yamaha fichase, en el 2009, a un joven tan agresivo, tan bueno. Me dio cierta rabia, sí. Pero, ahora, todo es distinto, somos más maduros y cada uno conoce su rol. Y, sí, los dos queremos ganar.

-Antes de llegar a Assen, estrenaron nuevo chasis en Motorland...-Y fue estupendo, al menos para mí; funcionó bien, aunque necesitamos confirmarlo en otras pistas. No sabía si utilizarlo aquí pero, al final, me he arriesgado y ha ido de fabula. Tiene una cosa muy buena, mucho, que nos hacía mucha falta: cuando se gastan los neumáticos, sigue proporcionando agarre y continúa siendo mucho más fácil de pilotar, eso nos permitirá hacer mejores finales de carreras. Y, ya ve, he logrado mi segunda pole en cinco años. Jorge me ganaba 7-0, ahora ya estamos 7-1. Yamaha no hacen pruebas en falso. Están haciendo un gran trabajo, pues saben que Honda y Ducati no están cruzadas de brazos sino trabajando para alcanzar nuestro nivel y la verdad es que están dando pasos.

-Hay alguna cosa en este arranque de campeonato que le disguste.

--Bueno, hasta llegar a Holanda podía decir que los entrenamientos no me salían todo lo bien que yo quería. Es decir, debo de clasificarme mejor el sábado, bueno, aquí, el viernes, pues con lo veloz que está Jorge (Lorenzo) salir desde la tercera línea, como me ocurrió en Barcelona, significaba darle mucha ventaja, pues cuando llegué, él ya se había escapado lo suficiente como para resultar inalcanzable. Aquí, al menos, lo hemos solucionado.

-Parece que para ganar este título habrá que ganar carreras y, tal vez, no sea suficiente subirse al podio.

--No lo tengo muy claro. Es difícil de pronosticar. Este es un campeonato algo extraño. Hasta ahora parece que la pelea sea solo entre Jorge y yo, pero, ya ve, Honda ya se ha metido en la lucha. Tanto Marc (Márquez) como Dani (Pedrosa) han demostrado en Assen que vuelven a ser altamente competitivos. De momento, lo importante es mantenerse delante de Jorge, no importa si es o no ganando carreras o visitando el podio.

-Para un piloto como usted, calculador, puede ser beneficioso que hayan más pilotos en la lucha.

--Ahora mismo, sólo persigo ser el más fuerte. Quiero pilotar como nunca y, sobre todo, divertirme. A mí siempre me ha gustado pelear en carrera, sobre todo con los pilotos actuales, que son muy correctos y respetuosos en la pista, incluso cuando nos adelantamos. De momento, me preocupa más que nuestra moto no deje de evolucionar, de mejorar, que los adversarios que tengo.

-¿Es verdad que, al margen de las carreras, no hace planes de futuro?

--Totalmente cierto: no tengo otro plan de futuro que seguir corriendo. Prefiero seguir pensando en el día a día, como hasta ahora. En estos momentos, estoy muy contento de haber vuelto a ser competitivo y poder divertirme con mi Yamaha. No tengo ni idea de lo que ocurrirá en el futuro. No tengo una bola de cristal ni hago planteamientos a medio o largo plazo. Siempre he dicho que comeré hasta saciar mi hambre, hasta que no pueda más. Mientras me divierta, seguiré corriendo. Eso sí, tengo muy claro que no seré eterno.

-Siendo un deporte mecánico, la condición física tal vez no cuente tanto a la hora de meditar el adiós.

--La profesión de piloto ha cambiado mucho con el paso del tiempo. Hoy en día los pilotos son unos atletas increíbles y la preparación física se ha convertido en algo fundamental, como en el fútbol. Antes no era así. Antes, podías entrenarte mucho menos, irte a la cama mucho más tarde, beber alguna que otra cervecita y, al día siguiente, ganar. Antes se podía gestionar una carrera de manera distinta, estudiabas a los rivales y la gran batalla se desataba en las últimas vueltas. Hoy en día rodamos en tiempo récord desde la primera vuelta del gran premio y el ritmo de carrera es increíble. Ahora, si sales desde muy atrás o fallas en la salida, es complicadísimo recuperarse.

-En ese sentido, todo el mundo decía que usted apenas se entrenaba y que casi no visitaba el gimnasio.

--Me entreno y mucho, sí. Y no me entreno sólo para mantener un ritmo alto en carrera, sino para estar más concentrado en cada momento. He cambiado algunas rutinas, pero eso no me ha supuesto esfuerzo alguno. Hacer deporte me gusta y siempre intento entrenarme con la moto. Cuando no tenemos carrera, estoy en el 'Ranch', con los chavales de mi Academy y algún amigo, practicando derrapadas. Y voy al gimnasio, sí, aunque prefiero, como todos mis colegas, entrenarme con la moto.

-El otro día leí en una entrevista que le hicieron en Italia que ya le ha dicho a su compañera Linda Morselli que eso de ser padres va para largo.--Ya tendremos tiempo para todo eso. Insisto, no hago planes. No tengo otro plan que seguir corriendo, que ser competitivo. Le he dicho a Linda que eso deberá esperar aún 10 años, pero era una forma de hablar, una manera de decir que, de momento, no pienso en ello.

-Usted ha sido un genio influyendo psicológicamente en sus rivales ¿le sigue funcionando esa táctica?

--Eso también ha cambiado con el paso de los años, aunque forma parte de mi carácter. La verdad es que ahora ya no gano con la facilidad de entonces. Incluso hasta la manera de festejar las victorias o los podios es diferente ¿verdad? Ahora sólo pienso en ser fuerte, ir rápido y divertirme. Me temo que, ante las nuevas generaciones de pilotos, la única táctica que sirve es ser más veloz que ellos. Lo otro ya no funciona tanto.

-Su hermano Luca Marini, fruto del segundo matrimonio de su madre Stefania Palma, es muy rápido, lo que significa que el ADN de la velocidad es suyo y no de papá Graziano.

--Estoy muy contento y muy orgulloso de mi hermano Luca. La semana pasada, en Barcelona, se subió al podio de Moto2 en el nuevo CEV. ¡Acabó segundo detrás de Edgar Pons, el hijo de Sito! ¡Y ya es tercero del 'Mundialito'! Me hace muy, muy, muy feliz verlo ahí. Mamá está siempre con él y me lo cuenta todo. Y el ADN de la velocidad, es de los dos, de Graziano y de Stefania. Luca es como los chicos de mi Academy, me llenan de orgullo a medida que progresan. Y progresan mucho.

-Todos dicen que habrá un antes y un después de la era Rossi.--Desde que empecé siempre he querido contribuir al crecimiento del motociclismo. Son otros los que deben valorar si he sido importante para mi deporte. Yo lo único que puedo decir es que estoy muy orgulloso de lo que he logrado y de todo lo que me ha dado este deporte, que es mucho.

-¿Es verdad que el lunes se va a una fiesta en Goodwood?

--Sí, me ha invitado Lord March y Yamaha conmemora los 60 años en las carreras. Voy a pilotar mi M1 y, además, tendré la posibilidad de conducir algunos coches históricos. Pura diversión.