Tras el zurdazo, la peor lesión

Empezaba a encandilar a la afición del Stoke City. Empezaba a ilusionar a su fornido entrenador, el gran Mark Hughes. Empezaba a soñar con, esta vez sí, una temporada completa, repleta de goles y, quien sabe, si de la gloria que tanto se le ha resistido. Empezaba a ser titular fijo (lo fue en 11 de los últimos 12 partidos disputados por el conjunto inglés) y a contar en la formación que los seguidores de los Potters recitaban de memoria.

Todo eso y mucho más rondaba por la cabeza de Bojan Krkic cuando, tras conseguir todo un golazo desde fuera del área, con un zurdazo de volea, en el partido de la FA Cup frente al Rochdale (1-4 para los suyos), pisó el césped con tan mala fortuna, con tal desgracia, que se dañó gravemente. En principio creyeron que el menisco, pero una resonancia magnética confirmó que se había roto el ligamento cruzado externo de la rodilla izquierda, la del golazo, el arco que llevó la flecha hasta la escuadra derecha del portero del Rochdale.

Primero fue la cadena de televisión Sky News la que anunció que la temporada del otro noi de Linyola (el primero fue el monstruo Josep María Fusté) se había terminado, pues la lesión era «grave». Y solo ayer, tras la confirmación médica, el Stoke City lamentó la pérdida durante lo que resta de temporada de su goleador, sustituido, en el minuto 32 de juego, por el irlandés Stephen Ireland.

«Es un golpe muy duro --señaló el propio Hughes--, tanto para nosotros como para el propio Bojan, que estaba siendo protagonista en la Premier League y disfrutando sobre el terreno de juego». Bojan, de 24 años, llevaba tres goles en los últimos cinco partidos y, tras un inicio de temporada muy irregular («no es fácil, no, adaptarse a nuestro fútbol», había repetido varias veces Hughes), se había ya consolidado en el equipo titular del conjunto inglés.

Mensajes de ánimo

Bojan, que también tiene ligeramente afectado el menisco de esa misma rodilla, ya sufrió una lesión similar (entonces fue rotura «parcial») en el 2011 en un Barça-Almería. En aquel momento fue tratado por el doctor Ramon Cugat. De momento, Bojan aún no ha decidido dónde operarse, aunque todo parece indicar que volverá a confiar en el galeno catalán.

«Ànims amic», tuiteó pronto el excapitán azulgrana Carles Puyol. «Tornaràs més fort», le animó desde Sevilla su colega Gerard Deulofeu. Fueron muchos los mensajes que Krkic recibió a lo largo del día de ayer y, sin duda, los que recibirá en los próximos seis meses que son, dicen, los que necesitará para volver a los terrenos de juego y tratar de conectar, de nuevo, con el gol, su hábitat natural. El que ya se había ganado en el Stoke City de Mark Hughes.