El Total Fight de Grandvalira muestra el mejor 'freestyle' del momento

A lo largo de esta última década, muchas competiciones de 'freestyle' han aparecido y luego desaparecido del mapa con una facilidad pasmosa, seguramente a causa de la dificultad de encontrar patrocinadores o porque simplemente se movían según los vaivenes de la moda. El Total Fight de Grandvalira, sin embargo, no solo ha resistido desde el 2005, sino que año tras año consigue progresar y mostrar nuevos alicientes. Después de ser distinguido con cinco estrellas (de un máximo de seis) en el World Snowboard Tour en el 2013, mañana comienza su 11ª edición con seguramente el mejor cartel de su historia, gracias a la presencia de un buen número de campeones del mundo en la especialidad de 'slope style' en snowboard (la modalidad de esquí tendrá lugar el fin de semana siguiente).

El parque de nieve de El Tarter (Andorra) acogerá a un total de 40 'riders' procedentes de 15 países distintos, entre ellos el finlandés Roope Tonteri (campeón del mundo en el 2015) o el belga Seppe Smits (campeón del mundo en el 2011). También habrá otros miembros destacados del circuito mundial como el canadiense Tyler Nicholson o los norteamericanos Kyle Mack, Erick Beauchemin o Eric Willet. Prueba del salto de nivel que está experimentando la competición –a la que se accede por puntuación– es que este año solo habrá dos representantes peninsulares, el hispano-holandés Bing Voorham y el catalán Bernat Ripoll, gracias a una invitación por parte de la organización de la competición.

MÁXIMO NIVEL

Ripoll, que ha estado entrenando los últimos meses en California, encara el Total Fight con respeto pero también con ganas de hacer un buen papel: "Esta prueba ya puntúa para la temporada que viene, así que los mejores riders vienen a conseguir puntos. Será muy complicado competir con ellos, aunque mi objetivo es dar el máximo para clasificarme para la fase final. Si consigo 'planchar' la ronda que he estado entrenando, tengo posibilidades".

En este sentido, mañana tendrá lugar la fase de clasificación, en la que cada participante tiene tres intentos para hacer su mejor ronda. En base a ello, un equipo de jueces selecciona a los 16 mejores, que pasarán a la final del sábado, que se disputa en formato de clasificatorias de uno contra uno. "Durante la fase de clasificación tienes que dar el máximo y arriesgar, para conseguir pasar a las finales. Luego, en el enfrentamiento directo, ya entra en juego la estrategia", explica Ripoll.

Una de las claves de la evolución del Total Fight se debe al circuito que construye la organización especialmente para la ocasión, que en este caso estará formado por cinco módulos que combinan saltos y 'jibbing' (deslizarse sobre barandillas y cajones) y que busca potenciar al máximo la espectacularidad de las acciones. "En todas las competiciones ya se están viendo trucos con triples invertidos, así que si el circuito lo permite se verá una evolución en las maniobras respecto a años anteriores. Ahora, además, se está puntuando mucho más el estilo", recalca el rider catalán. Además de los puntos para la clasificación del circuito internacional, la organización repartirá 50.000 dólares en premios entre los 15 primeros clasificados del torneo.

LA TEMPORADA SE ALARGA

Por otro lado, las páginas de 'A punto de nieve' también recogen el anuncio de buena parte de las estaciones de esquí del Pirineo de que alargarán la temporada más allá de Semana Santa. En el caso de Vaquèira-Beret, mantendrá abiertos del 7 al 12 de abril 69 kilómetros esquiables, mientras que las estaciones del grupo de FGC estarán operativas el fin de semana del 11 y el 12, aunque cerrarán entre semana. Masella, que suele ser de las últimas en cerrar, no ha confirmado una fecha concreta, pero sí ha anunciado que ha acumulado más de 30 centímetros de nieve fresca en los últimos días, lo que hace pensar que podrán prolongar la campaña algunas semanas más.

Consulta el estado de las pistas en el Canal Esquí de EL PERIÓDICO.