La otra mirada

«El tenis es mi mujer y los animales son mis amantes»

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INÉS ÁLVAREZ
BARCELONA

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Frank Cuesta (León, 1971) tiene dos grandes pasiones:  los animales y el tenis, y no  renuncia a ninguna de ellas. De los bichos  se ocupa en sus programas de tele, como Wild Frank, que emite los domingos Discovery Max. La raqueta nunca la ha soltado: primero como jugador y, tras un accidente, entrenando a otros.

-El tenis es una de sus grandes pasiones, ¿no?

-El tenis es mi mujer y los animales son mis amantes.

-De hecho era tenista profesional, pero un accidente de moto acabó con su carrera.

-Sí. Tuve una lesión y recuperar el timing era muy difícil. Yo entonces ya estaba en la academia de tenis de Bollettieri, y  allí ya me dijeron que mejor me dedicara a ser entrenador.

-Una academia muy prestigiosa. ¿Conoció allí a alguna joven promesa?

-Sí. En esa época estaban allí Monica Seles, Andre Agassi, Jim Courier, Brian Gottfried, Pete Sampras... Es muy gracioso, porque  los ves después de muchos años... y cuando la gente te habla de ellos, piensas: pues mira que no viajamos e hicimos cosas juntos...

-¿Entrenaba con ellos?

-Sí, hasta que tuve la lesión, Entonces empecé como sparring, es decir, mientras que ellos entrenaban estaba en la pista con ellos jugando, y luego pasé a entrenar.

-Y ahora lo hace en la academia de Tailandia.

-Sí, me salió eso y me quedé allí. En Tailandia sacamos a Paradorn Srichaphan, que estuvo entre los mejores del mundo. Ahora está retirado.

-Si hubiera seguido su carrera de tenista...

-Es que el «y si...» a mí no me gusta. No le puedo decir si me hubiera tocado la lotería, qué hubiera pasado. Tampoco si hubiera seguido siendo jugador... Siempre pienso en lo que hay; no  me gustan las hipótesis.

-¿Y aparte del tenis, lo suyo son los deportes de riesgo?

-No. La gente piensa erróneamente que soy un loco de la adrenalina. Pero yo soy un tío muy tranquilo. Creen que hago el loco por la vida y con los animales.

-Jesús Calleja dice que los aventureros tienen la seguridad muy presente...

-Claro, porque desde el momento en que entras en la temeridad y pierdes la concepción del peligro, te puede pasar algo. Cuando rebasas una barrera, estás poniendo tu vida muy en peligro. Y, ojo, Calleja está loco perdido. Está rebasando límites y tú dices: «¡Tío, que tienes ya 50 tacos...!».

-Se le ve en forma...

-Lo básico en la vida es hacer deporte para estar bien. Y el tenis ya hace mucho.