ALPINISMO

Carles Vallès: "Subir al Everest, según cómo, no es alpinismo"

El alpinista catalán, que ascendió 5 ochomiles (Cho Oyu, Everest, Broad Peak, Lhotse Shar y Makalu) entre 1984 y 1991, lamenta la transformación de las expediciones en el Himalaya

Carles Vallès, en el Everest.

Carles Vallès, en el Everest. / periodico

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Claro que ha cambiado el alpinismo en el Everest. Hace 30 años, nosotros tuvimos la gran suerte de vivir una aventura por la vertiente del Tíbet. Pero estamos en el año 2015, hemos vivido cambios en nuestras vidas, con los medios de transporte, las comunicaciones, los conocimientos técnicos, la meteorología, los límites que nos ponemos todos. Y esto también ha llegado a la montaña, pero no solo al Everest. También en los Alpes, al Mont Blanc, al Cervino... ¿Cómo puedes evitar que la vía normal al Mont Blanc no esté concurrida en julio y agosto? ¿Verdad que es imposible? Pues lo mismo sucede en el techo del mundo, donde hay empresas que montan por las rutas normales las cuerdas desde el campo base hasta la cima y suben el oxígeno. Sí, claro, hay que subir igualmente los 8.848 metros, pero subir agarrado a una cuerda como si fuera una barandilla con la ayuda de oxígeno... Lo siento, tengo que decirlo, y sé que genera polémica, pero esto no es alpinismo. Lo veo así. Pero es igual con la vía normal del Mont Blanc.

Pero que quede claro que no lo critico porque si lo hago con la gente del Everest, que ahora ya están empezando a montar cuerdas fijas tras el desastre del terremoto, también tendría que criticar a los guías de Zermatt o de Chamonix que llevan clientes a la montaña. Solo digo que según cómo se suba al Everest u otras cumbres, no se puede decir que se esté haciendo alpinismo. Pero tampoco admito que por culpa de esto se diga que en el Everest o en cualquier otro sitio ya no se puede hacer alpinismo. Claro que sí. Todavía hoy el Everest tiene vertientes desconocidas con posibilidades de abrir nuevas vías. Incluso subir al techo del mundo por el Nepal, a través de la ruta normal y en otoño sigue siendo un gran proyecto debido a que apenas hay expediciones.

Nosotros, hace 30 años, teníamos muy claro que queríamos subir y bajar sin oxígeno. Éramos un grupo atrevido, valiente... No me gusta decirlo así, me da algo de vergüenza. No era normal que en aquella época una expedición dijera de forma consciente que quería subir sin oxígeno. Luego, sin embargo, tuvimos que utilizarlo en el descenso porque estábamos exhaustos. Por eso nuestra expedición no pudo homologarse como una ascensión sin oxígeno. Y estoy de acuerdo con ello, por supuesto. Vuelvo al tema de la masificación en el Himalaya. Es imposible frenarla. ¿Regularla? Pues ¿por qué no empezamos por hacerlo en los Alpes? ¿Sabes por qué no? Porque los guías suizos y franceses pondrían el grito en el cielo. Pues lo mismo en el Everest, y mucho más tras el terremoto, pobre gente, ahora más que nunca hay que viajar al Nepal. ¿Cómo tienes que regular todo esto? ¿Verdad que todos queremos subir al Empordà en autopista, queremos una vía rápida hasta la Cerdanya o ir a Vielha en el menor tiempo posible? ¿No es más bestia que en un solo día puedas ir y volver de cualquier lugar de Europa en avión? Y eso nos parece lo más normal. Solo unos pocos dicen que es un disparate ecológico. Pues volviendo a la montaña, y al Everest, si un día me dicen, como parece ser que se está estudiando, que el Gobierno chino quieren agujerear el Everest por debajo para hacer pasar un tren y agilizar así las comunicaciones, pues me lo creo. Mira, estoy seguro que dentro de unos años ya estará hecho. ¿Quiénes somos nosotros, desde el calor de una calefacción o del fresco de un aire acondicionado, para decir que esto no se puede hacer? Pero si lo hemos hecho nosotros en el Mont Blanc, donde no solo hay un túnel sino que hay una vía rápida entre Francia e Italia. Y los británicos, ¿no construyeron el Eurotúnel? Sabiendo esto, ¿con qué excusa podemos decir al Gobierno chino o al nepalí que no lo hagan? ¿Estamos dispuestos a pagarles los beneficios económicos y comerciales que estas infraestructuras pueden aportar en los próximos 100 años? No, ¿verdad? Pues no podemos decirles que no lo hagan.

Pero si me preguntas si me sabe mal esta situación, si me duele... Pues sí, claro que me sabe mal por más previsible que sea. Pero es inevitable, y más ahora, en el Nepal, un país muy tocado tras el terremoto y que necesita las divisas de las expediciones y de miles de montañeros para ganarse la vida. ¿Cómo frenas esto? No se puede y, además, sería una inmoralidad. Es lo que creo.

Carles Vallès. Alpinista. 57 años. Subió 5 ochomiles (Cho Oyu, Everest, Broad Peak, Lhotse Shar y Makalu) entre 1984 y 1991.