Dos delanteros sin límites

Ronaldo completa un octubre impecable con 12 tantos

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ANTONIO MERINO / Madrid

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Hace un año, el fichaje más caro de la historia del fútbol arrastraba su maltrecho tobillo derecho tras caer lesionado el 30 de septiembre ante el Olympique de Marsella, en el Bernabéu. El 10 de octubre recayó de ese percance por jugar con su selección. Cristiano era un hombre amargado y el Madrid, un equipo sin rumbo: siete partidos sin el portugués y solo dos victorias. Ahora todo es diferente. Cristiano es el faro del Madrid y es el primero de la clase para Mourinho.

Con el siete de Raúl a la espalda, Cristiano vuelve a enfrentarse a su reto de ganar algún título con el Madrid. No lo consiguió en su primera temporada, algo que no le sucedió en su etapa en el Manchester United. Esta campaña, la llegada de Mourinho ha realzado aún más la figura de CR7, que se ha convertido en el emblema del equipo, según el técnico portugués.«Conocía a Cristiano como jugador, no como persona. Ahora le conozco y es un ganador porque se preocupa por su equipo y por ganar», decía Mourinho el pasado viernes.

Esos halagos no se producen ahora, cuando Ronaldo suma 12 goles en ocho partidos en octubre (11 en Liga y uno en Champions). Ya en septiembre, cuando solo hizo una diana (un penalti ante el Espanyol) en otros seis encuentros, Mourinho tampoco se desquició. Simplemente pidió paciencia. No la tuvo Cristiano, al que se le vio ansioso por romper su mala racha. En ese trajín se olvidó de que no juega solo o de que Higuaín también tiene gol. Las diferencias con el delantero argentino parecen solventadas dentro del egoísmo que caracteriza a los goleadores.

Más solidario

Llegaron los tantos y Cristiano comenzó a mostrar su lado más solidario regalando asistencias. Eso sí, en el campo sigue siendo el mismo. Se revuelve a la primera entrada que sufre y mantiene su carácter desafiante que le lleva a acaparar los insultos del público, vaya donde vaya. Nada de eso parecer preocuparle. Lo suyo es el gol u el gol es su felicidad.«Estoy fenomenal, en un gran momento de forma. He marcado y estoy feliz. Hacer goles nunca es fácil, pero ahora todo sale bien», decía Cristiano tras la victoria de su equipo ante el Hércules.

Ya en el mes del clásico, el choque del Camp Nou empieza a ocupar parte de la cabeza de Ronaldo, que sigue su particular pulso con Messi. El madridista marca cada 88 minutos, 11 menos necesita el azulgrana. Ahora volverán a verse frente a frente y CR7 confía en que su apetito goleador se mantenga.