La situación de la Liga

El Ajax, un destino habitual

Cuenca, cedido al equipo holandés, sigue la estela de Roger, Gabri y Oleguer

El mismo camino 8 Oleguer estrecha la mano de Van Basten el día de su presentación (2008). A la derecha, Cuenca, ayer, en la sede del Ajax.

El mismo camino 8 Oleguer estrecha la mano de Van Basten el día de su presentación (2008). A la derecha, Cuenca, ayer, en la sede del Ajax.

JORDI TIÓ
BARCELONA

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Barcelona y Amsterdam perviven entrelazadas futbolísticamente desde hace más de cuatro décadas. Esa relación amistosa nació con la llegada al Camp Nou de Rinus Michels en 1972, entonces entrenador del Ajax; se engrandeció con el aterrizaje de Johan Cruyff (1973) y Johan Neeskens (1974) y envejeció con la era Van Gaal (1997-2000), periodo que coincidió con el mayor número de jugadores holandeses en el club azulgrana, muchos de ellos forjados en la prolífica cantera del Ajax. Ese trasvase de norte a sur cambió de dirección, aunque en menor medida, en el 2006. Ese año, dos azulgranas ponían por vez primera rumbo al club holandés, Gabri y Roger Garcia, una senda que posteriormente siguió Oleguer Presas (2008) y que justo ahora también inicia Isaac Cuenca.

El delantero pasó ayer la revisión médica y el miércoles se entrenará con sus nuevos compañeros hasta el próximo junio, cuando finaliza la cesión en el club de Amsterdam. Cuenca, si lo cree oportuno el técnico Frank de Boer (quien en su día también viajó del Ajax al Camp Nou), podría debutar el domingo ante el Roda y empezar a goza de minutos de juego, lo que no podía tener en el Barça tras ocho largos meses parado por una lesión de rodilla.

Tres millones más variables

De los tres azulgranas que han precedido a Cuenca en el Ajax, Gabri fue el que más rendimiento dio. El mediapunta estuvo cuatro temporadas, disputando 86 partidos y marcando siete goles. Se marchó con tres títulos (2 Copas y 1 Supercopa), uno más que Oleguer (Copa y Liga), el único barcelonista por el que el Ajax pagó traspaso: 3 millones más 2,2 en variables. El central cumplió los tres años que firmó, jugando un total de 59 encuentros en los que anotó dos tantos: ambos de cabeza. Roger García, por su parte, jugó una sola campaña, conquistando la Copa y la Supercopa.