Pedrosa se harta de sufrir

El equipo Repsol Honda confía en que recobre la confianza para ir a Austin

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EMILIO PÉREZ DE ROZAS / BARCELONA

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Que Dani Pedrosa lleva tiempo teniendo serios problemas en sus brazos, especialmente el derecho, es algo sabido desde hace tiempo. De ahí que se operase el pasado año del conocido síndrome compartimental, tras el gran premio de Jérez. Pero que Dani Pedrosa estuviese meditando parar, bajarse de la moto y no volver a subirse a ella hasta que encontrase una solución médica, con o sin una nueva intervención, como anunció en Catar, es algo que los miembros del equipo Repsol-Honda desconocían. Todos los componentes del team campeón afirmaron ser conscientes del viacrucis vivido en el último año y medio por el piloto de Castellà del Vallés. Pero todos se sorprendieron del anuncio. Es más, muchos están convencidos que Pedrosa cogerá un avión, la próxima semana, rumbo a Austin (EEUU), para tomar parte en el segundo GP de la temporada.

"Yo no he dicho que me vaya a retirar. No lo he dicho jamás. Ni lo pienso", ha manifestado Pedrosa a TV-3 al regresar de Catar vía Suiza. En efecto, lo que ha pedido Pedrosa, y Honda se lo concede, es tiempo para buscar soluciones a su problema. Hablan de otra consulta con un especialista norteamericano. "Yo estuve muchos años con él -explicaba un antiguo mecánico de Pedrosa en el hotel Retaj Al Rayyan de Doha—y, desde siempre, ha tenido problemas con los brazos. Como dicen los futbolistas, "nosotros siempre jugamos con algún dolor". Pues, a Dani, le pasa lo mismo. Corre con dolor".

"Yo creo que lo que le ocurrió a Dani el domingo fue un arrebato, un hartazgo, un calentón, vamos", señala a EL PERIÓDICO un responsable del equipo Repsol-Honda, que pidió mantenerse en el anonimato. "Losail es un circuito muy duro para Dani, pues es uno de los trazados con más curvas de derechas (nueve sobre cuatro de izquierdas) y, por tanto, te pasas toda la vuelta haciendo fuerza con ese brazo, apurando la frenada, apoyándote en el manillar y abriendo gas a saco continuamente. Eso, a lo largo de 22 vueltas, te destroza. Y así fue como Dani se bajó de la moto. Harto. Y estalló".

Sorpresa absoluta

Muchos, en el seno del remozado equipo de Pedrosa, creen que, bajado el suflé, serenado, pasada consulta médica, Dani se animará a seguir "en las mismas condiciones que hasta ahora, pues no siempre sufre lo que sufrió en Losail". De ese sufrimiento y el anuncio ni siquiera se enteró Shinichi Kokubu, uno de los jefes de Honda. Kokubu se llevó una sorpresa mayúscula cuando, ya en la madrugada del lunes, un miembro del staff de Dorna TV le preguntó qué opinaba del anuncio de Pedrosa. "¿Qué anuncio? ¿Qué ha dicho?, no sé nada", respondió el jefe del departamento de competición de la firma alada.

El equipo Repsol-Honda le concederá todo el tiempo del mundo a Pedrosa y lo esperarán. No le buscan sustituto, ni piensan en Jack Miller o Casey Stoner. Ni hablar. Es más, insisten en que lo esperan en Austin. "No parece muy posible que algo que no ha podido solucionar en un año y medio, pueda arreglarlo en días", señaló la misma fuente del team japonés. Una cosa es segura: pilotar la Honda RC213V desgasta muchísimo. El británico Cal Crutchlow, recién llegado a Honda, ha comentado a sus amigos que nunca pensó que fuese "tan duro pilotar al máximo nivel esta moto".

Cambios para mejorar

"La lógica dice -insiste el antiguo mecánico de Pedrosa- que alguien que hace la revolución que ha hecho Dani en los últimos meses para intentar mejorar y ser más competitivo, separándose de Alberto Puig, cambiando a su técnico de confianza y fichando nuevos mecánicos, no puede lanzar la toalla tras el primer gran premio en el que vuelve a tener dolor".

Tan raro como la sonrisa y desparpajo que el propio Pedrosa ha estado mostrando ante los medios en los encuentros previos al inicio del Mundial, uno de ellos vivido, recientemente, en la sede de Repsol de Madrid donde, a diez días de viajar a Catar, expresó su "satisfacción por lo bien que ha encajado todo el equipo el cambio, aunque hay que ver cómo se comporta este team cuando empiece la auténtica tensión y presión que provocan las carreras".

Cierto, todos, en el seno del equipo de Pedrosa, reconocen que "los problemas serios se producen siempre en carrera, pues en entrenamientos él mismo trata de dosificarse, no realizando tandas largas". Una cosa está clara: lo que más le dolió a Pedrosa el domingo por la noche es que le superase Marc Márquez, que, al acabar la primera vuelta, ocupaba la 17ª posición. «Si no le he ganado hoy (por el domingo), no voy a ganarle nunca», comentó un dolorido y agotado Pedrosa a su entorno.