Muere Herzog, el primer alpinista en coronar un ochomil

Maurice Herzog fue el primer hombre en contemplar la tierra desde más allá de los 8.000 metros de altura. El alpinista francés, fallecido el jueves a los 93 años, se convirtió en el primer escalador en coronar un ochomil, el Annapurna (8.091 metros, en el Himalaya), en 1950, junto a su compañero de cordada, el también francés Louis Lachenal. Tras un descenso dramático, dificultado por el mal tiempo que les obligó a hacer un vivac, ambos sufrieron graves congelaciones en las manos y los pies por lo que tuvieron que serles amputados casi todos los dedos en el mismo campo base.

"Eramos conscientes de que corríamos riegos, pero para mí era esencial culiminar ese sueño", afirmó en una entrevista en 'Barrabés' el propio Herzog, quien se quedó en la cumbre mucho más tiempo que su compañero fascinado por el paisaje. "Era consciente de que nadie hasta entonces había podido contemplar todo aquello", se justificó el escalador, quien tuvo que dejar el alpinismo debido a las secuelas de las congelaciones. Curiosamente, el Annapurna no volvió a ser conquistado hasta 20 años más tarde. 

Convertido en un héroe en Francia, Herzog combatió también en la resistencia francesa contra las tropas nazis y fue ministro de Juventud y Deportes en el gobierno del general Charles De Gaulle. Nacido en Lyón en 1919, también fue alcalde de Chamonix, cuna del alpinismo mundial, entre 1968 y 1977. Precisamente, en esta población será enterrado Herzog, aunque la ceremonia fúnebre se celebrará en París. El propio presidente François Hollande ha rendido tributo a la figura de un "deportista, resistente y político que contribuyó a democratizar la práctica del deporte en Francia".