La preparación del equipo

Mascherano gana el brazalete a Piqué

EL DEFENSA ARGENTINo sale elegido en la votación del vestuario tras Iniesta, Messi y Busquets

Mascherano ríe tras escuchar los aplausos del grupo en la sesión de ayer.

Mascherano ríe tras escuchar los aplausos del grupo en la sesión de ayer.

J. D.
BARCELONA

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El vacío dejado por Xavi, el más evidente, estaba en la jerarquía del vestuario: el Barça se ha quedado sin capitán este verano. Le sustituía en sus ausencias del año pasado Andrés Iniesta; cuando faltaban los dos, el brazalete pasaba a Leo Messi. Y si se daba la casualidad que ninguno de los tres primeros jugara, que no se dio en ningún partido, el representante máximo en el campo era Sergio Busquets. La vacante de Xavi en la capitanía se cubrió ayer cuando se reunió el grupo al completo por segunda vez (la primera fue el lunes por la tarde). Una votación secreta de la plantilla designó al cuarto del escalafón. Y ganó Javier Mascherano por delante del otro gran aspirante al cargo que era Gerard Piqué.

No existe ninguna norma en la votación, completamente abierta. Ni edad ni antigüedad (solo Pedro y Alves llegaron al mismo tiempo que el central, en el 2008) se exige a los candidatos, aunque son valores inherentes que los compañeros contemplan. El año pasado, la marcha de Puyol y Valdés supuso el ascenso de Messi y Busquets, que ya entonces superó a Piqué, uno de los favoritos. La entrega del dorsal 5 de Puyol, la relación con Xavi y su personalidad, además de su función en el equipo, permitieron a Busi obtener el reconocimiento del grupo.

Cuestión de carácter

A Piqué le ha adelantado esta vez Mascherano, que llegó dos años más tarde al equipo. Por parecidos motivos que los de Busquets. Por el rol que desempeña en la caseta, el carácter que desprende en el campo y la seriedad y el rigor en el comportamiento de Mascherano (31 años) han prevalecido sobre las virtudes de Piqué (28), de quien se distingue su extroversión -le llaman farándulas o farandulero-, su propensión a las bromas y la imagen alegre que proyecta. A juicio de los futbolistas que opinaron, no casa con las características que le reclaman a uno de sus capitanes.

«No es algo que me quite el sueño ni me obsesiona», dijo Piqué en San Francisco. Durante la gira fue junto a Iniesta y Busquets el jugador que más participó en los principales actos promocionales. «Me gustaría ser capitán en el futuro, pero lo sea o no tendré un papel importante en el equipo», subrayó Piqué. Una observación que Luis Enrique ratificó. «Hay otros jugadores con peso específico que, sin ser capitanes, tienen voz y voto en la plantilla», dijo el entrenador, aprobando el dictamen del vestuario.