Jerez levanta el telón

El holandés Max Verstappen (izquierda) y el español Carlos Sáinz, durante la presentación del nuevo coche del equipo Toro Rosso de F-1, este sábado en Jerez

El holandés Max Verstappen (izquierda) y el español Carlos Sáinz, durante la presentación del nuevo coche del equipo Toro Rosso de F-1, este sábado en Jerez / periodico

MIGUEL MARTÍNEZ / JEREZ

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Puede que no se trate de un paseo militar como en el 2014, quizá no ganen 16 de las 19 carreras, pero Mercedes volverá a dominar en el 2015. Finalizaron la temporada con más de un segundo de ventaja sobre los Red Bull, sobre los Ferrari, frente a los McLaren, y dos meses después no habrá milagros. No ha habido tiempo de que los rivales recorten la ventaja.

La pretemporada comienza hoy en Jerez precisamente con la presentación del nuevo coche de los campeones y llegan tan fuertes, tan evolucionados, tan organizados, tan preparados como hace un año. McLaren necesita encontrar fiabilidad en la conjunción con el nuevo motor Honda, Red Bull se presentará hoy en Jerez con el coche recién salido del horno y Ferrari ha mostrado un monoplaza que en poco se diferencia del 2014.

Todo demasiado nuevo

"Tenemos que ser pacientes. Es un proyecto que necesita tiempo", advierte Fernando Alonso, sabedor de que este tampoco será su año. Todo el mundo confía en la alianza McLaren-Honda, pero el proyecto va más retrasado de lo previsto. El motor Honda instalado en el coche del pasado año apenas pudo completar dos vueltas en Abu Dhabi, así que se presentan en Jerez con la aspiración modesta de "rodar todas las vueltas que sea posible", asegura Alonso, que hoy será el encargado de estrenar el MP4/30 desvelado la pasada semana en Woking, un coche que recuerda mucho al Red Bull del 2014 como no podía ser de otra manera cuando es Peter Promodrou, el 'delfín' del gurú Andrian Newey, quien lideró el diseño del monoplaza.

Newey estaba preocupado porque su nueva creación, el RB11, no había pasado las primeras pruebas de impacto. Lo hizo ayer, así que hoy llegará justo para debutar con un motor Renault con algunas mejoras que, ya mismo, se antojan insuficientes. Ferrari también ha mejorado el motor, aunque en un chasis y con una aerodinámica muy similar a la del año anterior. "Será muy difícil ganar alguna carrera este año", reconoce James Allison, director técnico de 'la scuderia'. Con esa triste perspectiva debuta este domingo Sebastian Vettel de rojo, su sueño, dice.

No, no parece que nadie pueda toser a Mercedes, tampoco Williams, el segundo equipo en el Mundial de constructores del año pasado. Nadie cree que la 'escudería madre' les proporcione la última versión de su motor. Esa es para sus 'flechas de plata', para Lewis Hamilton Nico Rosberg, que siguen condenados a luchar de nuevo por el título frente a una oposición desorganizada.

La felicidad de Sainz Júnior

El 'paddock' de Jerez se ve algo desangelado sin Caterham ni Marussia, que tienen difícil volver a la competición, sin Force India, que aún no tiene el coche terminado, sin Lotus que, dicen, está de camino, y puede que llegue en dos días. La crisis de grandes, medianos y pequeños no parece afectar a Toro Rosso. Si el año pasado conseguía entrar regularmente en la Q-3 y luchar por los puntos, este año puede que incluso dé un paso más en relación al resto, liderados por los diseños del eficaz James Key. "Es muy importante que el coche nazca fuerte", dice el joven Carlos Sainz Júnior, que será el encargado de hacer debutar a su nuevo coche.

La de 'Carletes' es la lucha por hacerse un hueco, un nombre, por quedarse en la F-1 y disfrutar algún día de un coche para ganar un título, ese que ahora solo dispone Mercedes. "Hay muchas novedades en este coche. Hemos encontrado más rendimiento en una serie de apartados. Hay una gran cantidad de cambios. Necesitábamos mejorar porque nuestros rivales han hecho lo mismo", comenta Paddy Lowe, director técnico de la escudería de la estrella. Dan miedo.