El Girona asalta Getafe

El Girona reparó una avería que hubiera podido ser severa de haber salido de vacío de Getafe. Pero asaltó el Coliseum con una actuación notable y una victoria por 0-2 que fue muy corta por los méritos contraídos por el equipo de Pablo Machín, dominador absoluto de un partido que acabó con la afición local pidiendo la dimisión de Esnaider.

Cierto es también que el duelo se puso muy de cara a los rojiblancos, con un gol de Longo en el minuto 14 y la expulsión de Feltscher en el minuto 22 que dejó con muy poca capacidad de respuesta a los madrileños. El Girona fue el gran dominador del partido, con un centro del campo que se comió a los locales, y si no obtuvo un resultado más amplio fue por el exceso de individualismo de los visitantes después del 0-2, marcado por Rubén Alcaraz (70').

Con la victoria casi en el saco, el Girona perdonó repetidamente el 0-3 y también la goleada. Y pudo costarle muy cara la cosa, pues en el minuto 86 el árbitro sancionó con penalty un empujón de Ramalho a Stefan que el delantero local envió a la madera. El Girona no solo sumó la primera victoria lejos de Montilivi, sinó que también consiguió mantener por primera vez el cero en su portería y rompió una racha de cuatro partidos sin ganar.