El 'galáctico' es Messi

El 10 del Barça suma siete Ligas, tantas como las estrellas blancas desde el 2001

Leo Messi con su hijo Thiago durante la celebracion del titulo de liga

Leo Messi con su hijo Thiago durante la celebracion del titulo de liga / periodico

MARCOS LÓPEZ / BARCELONA

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Lleva 15 años reuniendo galácticos, a precio de galácticos, pero no puede Florentino Pérez con el Barça. Ni con Messi. Y eso que arrancó su época en el agujero negro de Gaspart -se llevó a Figo- y dejó tierra quemada en el Camp Nou durante tres inacabables años (2000-03). Pero luego el Barça activó el círculo virtuoso, sonrió Ronaldinho, creció Messi y el balance es tan espectacular como desolador para Florentino, dueño de una inmensa y carísima colección de cromos que no le han permitido acabar con la obra de Messi, iniciada por Rijkaard, sublimada por Guardiola, continuada, de forma trágicamente breve, por Tito, interrumpida por el paréntesis Martino y renacido ahora con Luis Enrique tras Anoeta.

Lleva Messi tantas Ligas (7) como han reunido estrellas planetarias como Figo, el pilar sobre el que se levantó en sus inicios Florentino (2001 y 2003), además de Ronaldo (2003), Zidane (2003). Aún no estaba Messi en el Camp Nou. Y aún seguía Gaspart en el palco. Echó luego a Del Bosque, lo consideró "anticuado" buscando quizá otro nuevo impulso, como hizo ayer con Ancelotti, y el Madrid entró en depresión, mientras el Barça llenaba el museo.

7 a 1 con Ronaldo

Aquel impulso de Florentino terminó, curiosamente, con él en la calle (febrero del 2006) cuando Messi ya iba camino del paraíso. Beckham, el último galáctico antes de la llegada de Ronaldo, también ganó una Liga (2007). Aparecieron después la estrella portuguesa y Kaká (ambos en el 2009) después de haber invertido 260,3 millones de euros para combatir al Barça de Guardiola que iluminaba el mundo. Pero el dinero tampoco le dio la felicidad. Ronaldo solo ganó una Liga, la del 2012 con Mourinho, la que frustra el cuarto título consecutivo del Barça de Guardiola. La misma Liga que tiene Kaká. Messi, en cambio, suma siete campeonatos cuando está a punto de cumplir 28 años.

La calma de Luis Enrique

Luis Enrique, que estaba mucho más fuera que dentro el pasado 4 de enero tras perder en Anoeta, observa el despido de Ancelotti desde su casa de Gavà preparando dos finales: el sábado en el Camp Nou ante el Athetic y el próximo 6 de junio en Berlín se juega la Champions contra la Juve, que precipitó con el gol de Morata la salida del técnico italiano. En enero, el Madrid vivía en una nube (había encadenado 22 victorias consecutivas, era campeón del mundo) y se le comparaba con el Barça de Guardiola.

En mayo, sin embargo, Ancelotti ha sido triturado por Florentino, a quien no le sirve un año después el técnico que le dio la Décima en Lisboa. Quedó, en realidad, torturado por el Barça, que desde el 2003 hasta hoy ha tenido cinco entrenadores: Rijkaard, Guardiola, que se fue por voluntad propia, Tito, que falleció; Tata, que dimitió minutos después de perder una Liga, y Luis Enrique. Todos gozaron del auténtico galáctico: Messi.