El Espanyol puede golear y sufre al final

Fue increíble. Dífícil de entender. El Espanyol empató un partido que debía ganar por goleada. Su falta de puntería en la segunda mitad y algunos errores puntuales permitieron que el Levante, pitado por su público, empatara al final un duelo que lo tenía perdido. El grupo de Sergio logró su sexto partido consecutivo sin perder, pero fue un empate muy amargo por inmerecido. El castigo también llegó a Víctor Sánchez, que se perderá el derbi por amonestaciones.

Era un partido peligroso para el Espanyol porque no era lo mismo enfrentarse a un equipo que lucha por los puestos de arriba como el Villarreal a jugar contra un rival que necesitaba ganar para huir del descenso. La tensión, los nervios, la angustia y la presión de la grada podrían hacer mella en los jugadores del Levante. Era la película que esperaba Sergio González, el técnico perico, que su equipo aguantara la presión inicial del conjunto granota, pero sin dejar de llegar arriba, que el rival notara que el Espanyol podía marcar en cualquier momento.

Fue un inicio muy incómodo para los jugadores pericos, que comprobaron enseguida que el Levante salió a por todas, a por el gol. Seguir un año más en Primera pasaba por ganar en casa al Espanyol, por romper esa racha negativa de dos derrotas consecutivas en Valencia.

El Espanyol se encontró con pocos espacios y una presión agobiante de los locales que provocaban constantes perdidas de balón. El grupo de Sergio solo conservaba el balón si miraba a su portero. Pase atrás y balón largo a ninguno. Este partido no tenía nada que ver con el de Vila-real. El juego perico era muy plano. El balón apenas llegaba a sus puntas. Y la defensa sufría por la presión local. Al menos, la zaga perica solo forzaba córners.

Gol en el primer disparo

Las dos tímidas subidas pericas hicieron daño atrás, pero los centros desde la izquierda no encontraban rematador (m. 9 y 12). Este era el guion previsto por Sergio. Cualquier balón colgado al área del Levante, haría daño. Así sucedió. El Espanyol se adelantó en el marcador tras un centro del capitán que remató a puerta Víctor Sánchez, el balón acabó en el pie derecho de Lucas. Gol en el primer disparo perico (m. 17).

El Levante empató muy pronto, a balón parado, en un córner. Simao aprovechó su altura para batir a Casilla (m. 20). Este tanto envalentonó al Levante, que obligó a los catalanes a estar muy atentos atrás. Caía un córner tras otro. pero no pasó nada, cosa importante porque el Levante era muy superior en el juego aéreo. El Espanyol fue inteligente y esperó el bajón fisico de los futbolistas de Alcaraz. A falta de 10 minutos, el balón ya era perico y el equipo ya triangulaba mejor. Se le había acabado la gasolina al Levante. El Espanyol forzó su primer córner en el minuto 41 y Caicedo marcó en tiempo añadido (m. 45).

El Levante tenía que salir igual de fuerte en la segunda parte. Los blanquiazules estaban advertidos del arreón local. Aguantaron atrás cinco minutos y luego se hicieron con el balón. Duarte (m. 53), Víctor Sánchez (m. 56), Álvarez (m. 62), Stuani (m. 66), Duarte (m. 69), Sergio García (m. 71), Lucas (m. 81), Stuani (m. 82), Lucas (m. 83) pudieron marcar. Sí, marcar. Pero el Espanyol no remató, perdonó y se dejó empatar por culpa de un despiste defensivo que dio aire al Levante. El Espanyol no sentenció y se fue con un punto amargo.

Alineaciones

Levante: Mariño, Ivan López (José Mari, m.59), Vyntra, Juanfran, Toño, Simao (Rubén, m.59), Camarasa, El Zhar (Víctor Casadesús, m.74), Morales, Uche y Barral.

Espanyol: Casilla, Arbilla, Álvaro, Héctor Moreno, Duarte, Lucas Vázquez (Felipe Mattioni, m.84), Javi López, Víctor Sánchez, Víctor Álvarez (Montañés, m.71), Sergio García y Felipe Caicedo (Stuani, m.60).