El Espanyol negocia la rescisión con Power8

Desde que el Espanyol inauguró su nueva casa el 2 de agosto del 2009, la intención de los dirigentes fue buscar un patrocinador para el estadio. Reuniones, viajes, presencias en convenciones. En fin, numerosas citas para dar a conocer un recinto que fue premiado como la mejor instalación deportiva del 2010. Pero el club tardó cinco años para encontrar un patrocinador que diera nombre a su estadio. Las primeras reuniones se fraguaron en Madrid y las negociaciones culminaron con la firma en junio del 2014. Power8 daría nombre al estadio y colocaría el logo en la camiseta. El acuerdo se cerró por siete temporadas a 5,5 millones por año, aunque el patrocinador podría renunciar al final de la tercera temporada en el 2017.

Lo que no pensaba el Espanyol es que Power8, por problemas económicos, les trasladara hace unas semanas la intención de romper su relación antes del tercer año. El club, que ha percibido por adelantado algún pago de la próxima temporada, está negociando una salida airosa a esta situación inesperada. "Estamos defendiendo nuestros derechos y reclamando lo que se nos debe", afirmó hace unos días Rafa Entrena, vicepresidente del Espanyol. El bufete Cuatrecasas lleva los intereses del club en este litigio. "El naming right del estadio vale más ahora que cuando firmamos con Power8. Si rescindimos el actual contrato, buscaremos otro patrocinador", confirmó el dirigente. Hasta ahora, el Espanyol ha recibido de Power8 siete millones de euros. El objetivo final de esta empresa era el Barcelona World, el complejo turístico y de ocio que debía construirse en Salou. Todo parece indicar que el Espanyol mantendrá el nombre del estadio y el logo de la camiseta hasta junio del 2016. Aunque la entidad ya ha comenzado a buscar otros patrocinadores para un estadio de cuatro estrellas. De ahí el reciente viaje de Joan Collet a Emiratos Árabes. El Espanyol lleva años buscando patrocinadores en el extranjero.