LA LIGA DE CAMPEONES

Dos minutos de 'rauxa'

Los jugadores del Barça se tiran sobre Luis Suárez tras el gol del delantero uruguayo, que ha supuesto la victoria ante el Leverkusen

Los jugadores del Barça se tiran sobre Luis Suárez tras el gol del delantero uruguayo, que ha supuesto la victoria ante el Leverkusen / periodico

DAVID TORRAS / BARCELONA

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En dos minutos escasos la vida del Barça ha cambiado de arriba abajo. En un minuto, el Camp Nou ha pasado de sisear, de removerse inquieto y echar desesperadamente de menos a Messi, de temer que la vida sin el '10' iba a ser un infierno, a alzar los brazos alocadamente y dejar atrás las malas sensaciones, y abrazar el marcador como una gesta conquistada con el corazón que no con la pelota. En dos minutos, el Barça se ha levantado de la lona, desde donde el futuro en la Champions aparecía borroso, y se ha colocado en lo alto del grupo, un liderato forjado en dos chispazos de Sergi Roberto y Luis Suárez, en medio de una dura batalla en la que el Bayer Leverkusen ha tenido las de ganas (2-1).

¿Cómo será la vida sin Messi? No era una pregunta, era una cuestión vital que asaltó a muchos culés desde el momento en que les faltó Leo y que este martes ha planeado sobre el Camp Nou. Y lo seguirá haciendo, hoy, y mañana, aunque con menos dramatismo que si todo hubiera acabado como tenía pinta de hacerlo. Sin esa cabalgada de Alba (tan insustituible como el tridente), sin el remate de Munir, sin el instinto de Sergi Roberto, el centrocampista que ha influido como lo que ha sido toda la vida y que no acaba de ser, el nombre de Messi iría de boca en boca. Messi como justificación de todo. Podría serlo porque nada es igual sin Messi pero lo será menos.

PRESIÓN IMPECABLE

Pocas veces dos minutos escasos han retratado tan bien un partido entero. Y no son los que han ido del 80 al 82, que precisamente han estado muy lejos del resto, sino los dos primeros. El balón se ha puesto a rodar y al instante, sin saber cómo, Ter Stegen le ha sacado la primera a Chicharito. En un pisplás, sin avisar, sin cocción. Y a la que el Barça ha recuperado el balón, ha sorteado la presión, se ha plantado en la otra área, en otro fogonazo. Todo a cámara rápida, sin pausa, los dos guiones expuestos a la brava, sin engaños. Roger Schmidt no transige ante nadie, sea el otro Bayern o el Barça del triplete, fiel al libreto que le ha valido la admiración de Pep Guardiola.

Todos estaban avisados, pero no ha habido manera de quebrar esa disciplina, ese afán por ir a buscar la pelota sin tiempo que perder, deprisa, deprisa. Parecía que el Barça iba encontrando el decodificador, ayudado por el desequilibrio de Iniesta, y que ha propiciado dos ocasiones, que Rakitic Sandro han resuelto mansamente ante Leno, en un anticipo de las muchas ocasiones que se han quedado a medio camino. De tanto comparar al Bayer con el Celta, se ha acabado repitiendo la falta de efectividad que ya le condenó en Vigo. Y con Messi.

Nada ha cambiado, y a los alemanes les ha caído uno de los regalos que más agradecen, un córner, que a los pies de Çalhanoglu, un especialista a balón parado, se ha convertido en medio gol. El gol entero lo han marcado entre Papadopoulos, el actor principal, y un triángulo de las Bermudas, que se ha tragado la jugada: Ter Stegen, Mathieu Suárez, a quien el portero, retratado en otra acción sospechosa, ha reprochado su falta de atención.

TER STEGEN Y CHICHARITO

Pero, tras ese error, Ter Stegen ha mantenido al Barça con vida y, de paso, ha salvado a un Piqué al que Bellarabi ha dejado sin palabras en un metro. Era gol o gol, y han aparecido las manos del portero, más importantes que los pies. Después, el héroe ha estado enfrente. Ha podido convertirse en el héroe del Bayer y en la distancia arrancar gritos de alegría de Madrid. Pero Chicharito, con la portería ahí delante, ha mandado la pelota al cielito lindo.

El Barça podía haberse ahorrado tanto sufrimiento. No ha tenido ni lucidez ni suerte, en especial, en una doble ocasión de Neymar Sandro, con poste y rechace milagroso. No todo ha sido un problema de remate. Ni mucho menos. En un combate a los puntos, tampoco habría salido bien parado. Nada más delatador que los pitos que se han escuchado ante la reiteración de pases atrás. Penalizado por pérdidas constantes de balón y la falta de salida desde atrás, el Bayer se ha encontrado la mar de cómodo. Hasta que le han empezado a fallar las fuerzas, ante ese esfuerzo imponente, y los cambios de Luis Enrique han reactivado al equipo, ni que fuera por empuje y ánimo, por encima de sufrir otra desgracia, como la lesión de Iniesta.

Nadie esperaba ese golpe de 'rauxa' de dos minutos, ni siquiera Artur Mas y Oriol Junqueras, invitados en el palco, y que quizá este partido sí lo dieron por perdido. Pero, lejos de rendirse y enfrentarse a la condena de oír que no hay vida sin Messi, el Barça se ha revuelto incluso contra las dudas de los suyos y en dos minutos ha cambiado esta historia.

Ficha técnica:

2 - Barcelona: Ter Stegen; Dani Alves, Piqué, Mascherano, Mathieu; Rakitic (Sergi Roberto, min.71), Busquets, Iniesta (Jordi Alba, min.60); Sandro Ramírez, Suárez y Neymar Jr (Munir, min.62).

1 - Bayer Leverkusen: Bernd Leno; Donati (Hilbert, min.71), Tah, Papadopoulos, Wendell; Kramer, Bender; Kampl, Hakan Calhanoglu, Bellarabi (Julian Brandt, min.65); y Javier Hernández 'Chirarito' (Kiessling, min.55).

Goles: 0-1, min.22: Papadopoulos. 1-1, min.80: Sergi Roberto. 2-1, min.82: Suárez.

Árbitro: Martin Atkinson, de Inglaterra. Cartulina amarilla a Neymar (min.37), Bender (min.41), Calhanoglu (min.63), Papadopoulus (min.67), Alba (min.75) y Kampl (mim.88).

Incidencias: partido correspondiente a la segunda jornada del grupo E de la Liga de Campeones jugado en el Camp Nou ante 68.694 aficionados, según datos facilitados por el club.