EL DUELO DE LAS PORTERÍAS

Del paradón de Casillas al error de Valdés

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Iker Casillas y Víctor Valdés, guardametas de la selección campeona de Europa y los dos mejores porteros de la Liga española, marcaron la suerte del partido de ayer. En apenas un minuto, a falta de apenas cinco para el final del primer clásico de la temporada, la eliminatoria pasó del 4-1 al 3-2. De estar prácticamente sentenciada a volver a estar totalmente abierta. En plena marea de juego azulgrana, después de otra sensacional asistencia de Andrés Iniesta (que firmó una última media hora colosal), Messi se plantó delante del marco del Madrid. El Camp Nou cantaba prácticamente el segundo tanto de La Pulga, pero Casillas repelió como pudo el disparo, el que hubiera significado el 15º gol que le hacía el argentino en 20 clásicos.

En el minuto 85 se terminaría cantando el gol: otra vez con acento argentino, pero camiseta blanca. Valdés recibió un pase comprometido y se hizo un lío con el balón ante la presión insistente de Di María. El portero de L'Hospitalet peleó, poniendo el cuerpo, intentando bloquear el paso del escurridizo extremo madridista, tratando de evitar lo inevitable mientras un «no,no,no» se apoderaba del estadio en una jugada que duró una eternidad.

Se volvía a repetir la historia del año pasado cuando, en el partido liguero del Santiago Bernabéu, un error del guardameta azulgrana permitió a Karim Benzema abrir el marcador de un choque se el Barça de Guardiola terminó ganando (1-3), igual ayer el de Vilanova. Al final, Casillas le dio un toque afectuoso a Valdés. Gajes del oficio.