Cristóbal saca brillo a la estrella

Alrededor de 2.000 -esas son las previsiones y esa es la cantidad de entradas distribuidas- teñirán mañana de rojo el campo del Horta. Será un acontecimiento histórico. Y no por la inusitada asistencia que registrará el estadio de Feliu i Codina, sino por la categoría del partido que alberga: un Damm-Málaga.

No es frecuente ver un choque de Copa del Rey juvenil. La Damm no disputaba la competición desde 1994 y porque en aquella época no lo exigía la clasificación. El mérito del equipo que dirige Cristóbal Parralo, exjugador del Barça y Espanyol, entre otros clubs, componente del dream team  que el miércoles celebró los 23 años de Wembley, lo emparenta con la recordada generación, por única, que en 1967 se plantó en la final copera (al perdió ante el Athletic) tras eliminar al Madrid.

Esta vez ha dejado en la cuneta al Mallorca y al Barça. No por eliminación directa, sino por rendimiento y constancia en el campeonato. La Damm ha escalado hasta el segundo puesto, solo por detrás del Espanyol, para disfrutar del privilegio de participar en la Copa, reservado para los dos primeros y los dos mejores terceros de los diferentes grupos de categoría nacional. El equipo de Cristóbal dio el primer paso para acceder a los cuartos de final al empatar en Málaga (2-2) en la ida. El club, fundado por la marca cervecera en 1954, ha reservado una parte de la grada para el centenar de seguidores andaluces que viajarán a Barcelona.

«Estamos recogiendo los frutos del trabajo y la metodología que implantamos», explicó Cristóbal, entrenador del juvenil A y director deportivo. Él es el artífice del cambio, reflejado en la proyección del equipo. Cristóbal lo salvó del descenso (2012-13), lo aupó al cuarto puesto el año pasado y lo ha impulsado al segundo esta temporada, con una ventaja de cinco puntos sobre el Mallorca  y ocho más que el Barça. Un tercio de la plantilla son juveniles de segundo año.

«Hemos recuperado el interés de chicos de otros equipos por venir con nosotros», comentó Carlos Pastor, exjugador, y ojeador y analista del club. Con un régimen casi profesional (el cuerpo técnico es de seis personas y el equipo preparó ayer jugadas de estrategia), la Damm conserva la esencia fundacional absolutamente altruista: mantiene 15 equipos (uno femenino, que ha sido campeón), sin cobrar nada a sus deportistas. Los padres ni siquiera han de preocuparse de la ropa ni los desplazamientos.