El Cornellà planta cara al Madrid con profesionalidad

Gran día, gran noche, gran eliminatoria copera, gran actuación de la Unió Esportiva Cornellà, que citó a 28.800 aficionados en el estadio del Espanyol para defender con honor, pundonor y profesionalidad su enfrentamiento copero de 16º con el Real Madrid (1-4), doble campeón de Copa y Champions, que no lo pasó bien durante la primera media hora de partido en la que el equipo de Jordi Roger trabajó duro, corrió más y tuvo la suficiente disciplina y organización como para neutralizar el tempranero gol blanco con un golazo de Óscar Muñoz.

El encuentro, la cita, que fue un festival blanco de posesión de balón, aunque no de oportunidades, fue una auténtica fiesta para el conjunto catalán y su afición, aunque el estadio estaba también repleto de merengues, que no cesaron de ovacionar a Isco, su nuevo ídolo, y, ya en la segunda parte, las cabriolas y el gol de Marcelo.

Un conjunto semiprofesional como el Cornellà, que cuenta con una cantera con más de 1.000 niños, plantó cara al Madrid y mostró una exquisita organización, aunque al final le fallaron las fuerzas tras ir, durante 70 minutos, detrás del balón. Pese a que desde muy pronto estuvo en desventaja (Varane remató un corner de forma magnífica, a los 10 minutos; cosa que repetiría, a los 36, para el 1-2), los catalanes nunca le quitaron la cara al partido y, a los 20 minutos, recuperaron un balón en el centro del campo y acabaron trenzando una jugada, que culminó Óscar Muñoz, con control en el semicírculo del área blanca y, de un tremendo chupinazo, superar a Navas.

Tras el descanso, el Cornellà siguió peleando y el Madrid controlando el balón y poniendo pausa al encuentro. Eso sí, a los 52 minutos, Chicharito resolvió un lio en el área local, después de que Benzema se tropezase con ella y fuese incapaz de rematra. La pelota no le duró, como es habitual en él, ni medio segundo a Chicharito, que remató, raso, veloz, duro, junto al poste derecho de Segovia.

Tras ese gol, dio la sensación de que Jordi Roger exigió, pidió, insinuó, sugirió a sus chicos que se lo pasasen en grande, que disfrutasen de la noche, y se vio a un excelente Cornellà, que no solo apretó al Madrid sino que, en determinados, momentos, incluso lo dribló con un montón de olés en la grada, que completaron una preciosa fiesta, que, al final, contó con un goleador Marcelo, que remató el cuarto gol merengue, obra de Isco, cuyo disparo lo rechazó Segovia, dejando el balón a los pies del lateral blanco.

Cornellà: Segovia; Joel, Dani Martí, Pelegrí (Martí, m. 55), Arnau; David, Sergio Gómez; Josele (Gallar, m. 55), Pep Caballé, Xemi (Luis Gaudioso, m. 69); Óscar Muñoz.

Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal, Varane, Nacho, Arbeloa; James (Marcelo, m. 59), Khedira, Illarramendi, Isco (De Tomás, m. 75); Benzema (Medrán, m. 75) y Chicharito.

Árbitro: Jaime Latre Santiago, del Colegio Aragonés. Tarjeta amarilla a Varane (minuto 62) y Joel (m. 87).