VENDEDOR DE BARCOS

Francisco Vaño: «Como te pasa algo en alta mar es dificil que te encuentren»

«Como te pasa algo en alta mar es dificil que te encuentren»_MEDIA_1

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NEUS JORDI / BARCELONA

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El pasado mes de enero se enfrentó a su primera travesía atlántica, y además lo hizo en solitario. «Es una prueba de resistencia física y mental, tanto para uno mismo como para el barco. Estás en medio de la nada, solo, y empiezas a repasar tu vida porque allí en medio tu vida no vale nada, sólo dependes de ti mismo y de tu barco,  tienes que conocerlo al milímetro. Y te repites una y otra vez  'Dios mío, que no se me rompa nada'. Porque si pasa algo allí no te encuentra nadie». Era lo que se decía Francisco Vaño cuando se vio metido de lleno en un temporal con vientos de más de 83 kilómetros por hora y olas gigantescas. Como consecuencia su velero sufrió una rotura que le obligó a navegar gran parte de la travesía, de 30 días, sólo con una vela.

A pesar de eso lo llevó bien. «Lo más estresante fue llegar a Canarias, por el tráfico que hay. Dormía en intervalos de 20 minutos, con un ojo mirando siempre el radar».

Alicantino residente en Murcia, de 61 años, gracias a su hijo pudo cerrar dos meses su negocio de venta de barcos para cumplir su sueño. Antes, invirtió dos años en hacer mejoras en su velero, Colombia IV«Un motor nuevo, cambio de velas, el sistema eólico, paneles solares… No he sumado el dinero que me he gastado porque si lo hago me da algo. Es igual que en una tormenta: que no se te ocurra mirar hacia atrás porque si lo haces te cagas encima».