La situación azulgrana

El 'candidato' Toni Freixa

El directivo medita presentarse a las elecciones y tensa su relación con Bartomeu

Freixa, el directivo azulgrana.

Freixa, el directivo azulgrana.

MARCOS LÓPEZ
BARCELONA

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No era una frase normal. Y menos viniendo de quien venía, Toni Freixa, directivo a secas, sin responsabilidad real ahora en la junta de Bartomeu, relegado por este a un papel marginal en el núcleo de poder del Barcelona. Fue el rostro y la palabra del rosellismo ejerciendo de portavoz de la directiva de Sandro Rosell, además de controlar el club como secretario del consejo directivo. Pero se marchó Rosell en enero del 2014 y Bartomeu prescindió de Freixa. No es ni portavoz -Manel Arroyo le sustituyó- ni tampoco secretario -Jordi Moix ocupa su silla-, más bien ahora convertido en un candidato virtual, «ilusionado» por alcanzar algún día la presidencia. De momento, le da vueltas a la idea.

«¿Usted cree que un candidato se puede presentar a la presidencia del Barça estando imputado?», le preguntó ayer Jordi Basté a Freixa en el programa 'El Món a RAC-1' a propósito de la delicada situación en que se encuentra el presidente Bartomeu por el caso Neymar, con la petición del fiscal de 2,3 años de prisión. «Eso le corresponde valorarlo a él y, sobre todo, a los socios», comenzó diciendo el exportavoz, quien consciente del calado de su respuesta hasta colgó en su cuenta de Twitter, a media tarde, el sonido íntegro de un mensaje que no sentó nada bien en la junta. Y en especial a Bartomeu.

Acusado y amenazado

No era, por lo tanto, una respuesta cualquiera. «Los socios del Barça, cuando un candidato está acusado y amenazado de ir a un juicio y de poder ingresar en prisión elegirán si este puede asumir la presidencia con el riesgo que eso implica», aseguró Freixa, quien luego argumentó que «él, el señor Bartomeu, deberá tomar la decisión íntimamente y personalmente. Yo se lo respetaré, por supuesto. Después los socios del Barça escogerán, con esta condición, si puede ser presidente o no», añadió.

Fue entonces cuando Basté interrumpió de forma breve al directo -«¿Qué riesgo implica?», le preguntó- y el tono de voz de Freixa cambió notablemente. «Hombre, esto es muy serio, ¡eh! Cuando hay una petición del fiscal de ingresar en prisión de 2,3 años es que la amenaza de la prisión existe», recalcó el directivo azulgrana. «Es algo que no le deseo a nadie y al señor Bartomeu menos. Pero es una cosa muy seria», reiteró el exportavoz, tras insistir en varias ocasiones que no está detrás de Oriol Giralt, el socio que impulsó la moción de censura contra Joan Laporta en el 2008, replicando a las acusaciones que lanzó Enric Masip. Eso sí, le conoce y tuvieron más de una conversación. El exjugador de balonmano fue más lejos que eso al vincular a su hermana con el equipo de Giralt.

Ahora, Freixa piensa en su futuro electoral. «A cualquier socio del Barcelona le gustaría ser presidente. Todavía no he decidido si me presentaré o no», concluyó.