EFEMÉRIDE SEÑALADA

El brazalete del centenar

Cesc ejerce de capitán el día en que suma sus primeros 100 partidos con la selección

Cesc fue objeto de un penalti que lanzó y falló.

Cesc fue objeto de un penalti que lanzó y falló. / periodico

JOAN DOMÈNECH / BARCELONA

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Fue el primero en salir al campo, y entonces tuvo la percepción de que se ha hecho mayor. Nunca había pasado en los 99 partidos anteriores. Nunca había sido el capitán. Nunca había sido el más veterano con tan solo 28 años. Y todo coincidió en un partido de los denominados para el carro del pescado, aquellos que son intrascendentes y se reservan para suplentes y debutantes. Como lo eran Etxeita y Mario, que aun siendo lateral derecho cuajó la noche soñada firmando un gol.

Para Cesc Fàbregas (4 de mayo de 1987) era una cita relevante la de Kiev, porque se trataba del partido número cien que disputaba con la selección española y la efeméride, más la voluntad de Vicente del Bosque, se consagró con el brazalete de capitán para encabezar la comitiva roja. Le faltó la guinda, el golito que completara la noche. La tuvo en sus manos y se le cayó al suelo. Cesc provocó un penalti y lo desperdició. Igual que los tres anteriores que había lanzado con España. Curiosa estadística la de Cesc quien, en cambio, acertó en los dos más trascendentales que le tocó ejecutar: los correspondientes a las tandas de penaltis ante Italia (Eurocopa 2008) y Portugal (2012).

Nueve años después

Extraño debió sentirse Cesc en un once desconocido. Él solo reunía más internacionalidades que sus diez compañeros (58). Sin que hubiera ningún testigo, por supuesto, de su debut ante Costa de Marfil (3-2) en Valladolid el 1 de marzo del 2006. Ramos, Casillas y Torres, todavía en activo, representan la vieja guardia que se ahorra citas como la de Kiev. Más años que del estreno de Cesc habían transcurrido desde la última alineación sin futbolistas del Barça. Diez exactamente: del 12 de octubre del 2005 en un amistoso ante San Marino (0-6).

Tres días después de que el equipo formara sin jugadores del Madrid (el pasado viernes en Logroño frente a Luxemburgo), Del Bosque ideó un once sin azulgranas, la base en la que se ha apoyado durante su mandato. Solo había un finísimo hilo conductor con la presencia de tres exculés: Cesc, hoy en el Chelsea,Thiago (Bayern) y Nolito (Celta). Bartra, Piqué, Busquets y Alba pasaron frío, y solo los dos últimos comparecieron al final.