Belmonte amplía su palmarés con otros dos oros y una plata

Probablemente no haya una palabra que defina lo que está logrando Mireia Belmonte. O quizá sí, pero aún no se ha descubierto. En solo dos días, la nadadora badalonesa ha conseguido conquistar Doha, escenario de la primera cita de la Copa del Mundo, y convertirla en Belmontelandia.

Ayer entró en remojo en la prueba de 400 estilos, en la que Katinka Hosszu le arrebató el primer puesto. Empezar con una plata no estaba mal, pero no se conformó. Aguardó, preparó su venganza y la sirvió en frío en los 200 mariposa, donde se colgó el oro por delante de la húngara con una marca de 2:03.39.

¿Suficiente? Quizá para otras nadadoras, pero no para ella. En menos de 10 minutos y sin apenas poder descansar, Belmonte saltó para competir en la final de los 400 libre. El resultado fue un dominio total de la prueba desde el principio y un nuevo oro, con 4:00.91 en el crono.

Tras sus seis metales en los recientes Europeos de Berlín, la catalana rea-

pareció en la capital de Catar sin la más mínima intención de bajarse de un podio que, a estas alturas, parece el sillón del salón de su casa. El oro en los 800 libre del miércoles solo fue la antesala de las otras tres medallas que estaban por caer antes de abandonar Doha. ¿Cuántas más podrá cosechar en las seis citas que quedan de la Copa del Mundo?