EL PARTIDO DEL PALAU
Un clásico muy azulgrana
El Barça ofrece una espléndida imagen y supera sus bajas para tumbar a un flojo Madrid (76-68)
Pase lo que pase este martes en el último partido de Liga del año que afrontará en Santiago, el Barça de baloncesto despedirá el 2014 con muy buen sabor de boca después de hacer suyo este domingo el clásico del baloncesto español con una solvencia inesperada (76-68). El triunfo, más allá del resultado, que descabalga al Madrid del liderato (ahora en manos del Unicaja) y lo iguala al equipo azulgrana en la segunda posición, supone una inyección anímica enorme para el conjunto de Xavi Pascual, que afrontó el encuentro plagado de bajas importantes (Navarro, Oleson, Abrines) y tuvo que recurrir durante 30 minutos al debutante Edwin Jackson, fichado esta misma semana y que cumplió a la perfección.
Salió reforzado el Barça por las sensaciones que transmitió como equipo en la misma medida que el Madrid abandonó el Palau Blaugrana, seguramente, plagado de dudas por la imagen de inferioridad que dejó en su visita y que no acabó de reflejarse en el marcador (76-68).
El Barça pintó el clásico de color muy azulgrana por su puesta en escena global, por la aparición de hombres importantes con Doellman, Huertas, Satoransky y Tomic que llevaron el peso del partido, por la aplicación efectiva de un guion de principio a fin, que le llevó a marcar el ritmo, a dominar con autoridad el rebote (44 por 30), a actuar de forma solidaria (16 asistencias), pero también por la aparición en momentos puntuales del resto del banquillo, algo que dice mucho en favor de la imagen del colectivo.
No fue así en el caso del Madrid, que se mueve este año entre las críticas y la irregularidad, que quedó en evidencia en muchas fases del juego y no encontró nunca un referente a nivel individual más allá de las apariciones puntuales de Maciulis (cuya presencia en pista limitó de forma sorprendente Pablo Laso) y también de Llull, con un Rudy especialmente apagado por el marcaje de Jackson y un Ayón desaparecido.
Inicio eléctrico
El principio del clásico prometía mucho más de lo que finalmente fue, porque resultó trepidante por los dos lados. Y a las acciones de tres puntos de Maciulis y Rudy respondió el Barça con dos mates de Hezonja y Doellman cargados de rabia, que encendieron el Palau. El equipo de Laso, además, anotó sus primeros tres lanzamientos triples y eso, unido al tono dubitativo de los azulgranas en el rebote en el inicio, permitió al Madrid controlar los primeros minutos (8-13) con un Maciulis muy activo, autor de siete puntos casi consecutivos.
No tardó, sin embargo, el Barça en encontrar el equilibrio en los dos lados de la cancha. Selló con acierto el rebote, lo que le permitió iniciar las acciones con velocidad. Y en ataque actuó con paciencia e inteligencia, buscando siempre el pase extra para encontrar el punto débil de la defensa blanca con entradas a canasta que hicieron mucho daño al Madrid.
La dirección de Huertas, y también la de Satoransky, que se doctoró en el clásico, ayudó al equipo de Pascual a encontrar siempre soluciones a los problemas defensivos que planteaba Laso y eso se reflejó rápidamente en el marcador.
El Madrid se movió siempre a impulsos. Los que le transmitían la mayoría de veces Maciulis y Llull, ya que Sergio Rodríguez, al que el entrenador blanco recurrió algunos minutos, aún no está para aportar. El Barça, en cambio, lo hacía de forma acompasada, con las ideas mucho más claras en los dos lados de la cancha, y con la impresión de que todos los jugadores tenían un rol y estaban en condiciones de sumar para el equipo.
La ventaja en el marcador en el descanso (47-40) ya dejó clara la mayor consistencia del Barça, que a pesar de atascarse ofensivamente en el tercer periodo, el más flojo de los cuatro (solo anotó 11 puntos y encajó 15), no perdió el control del partido en ningún momento. Con Huertas al mando de las operaciones, con un papel protagonista de los nuevos como Doellman, Thomas y Pleiss, con buenos minutos de Hezonja y del recién llegado Jackson, el Barça llevó el partido a donde quería, a un triunfo que refuerza su apuesta de la temporada.
Ficha técnica:
76 - FC Barcelona (24+23+11+18): Marcelinho (10), Hezonja (5), Thomas (6), Doellman (12), Tomic (12) -cinco inicial-, Pleiss (6), Lampe (7), Satoransky (10) y Jackson (8).
68 - Real Madrid (22+18+15+13): Llull (12), Rudy Fernández (8), Nocioni (6), Maciulis (14), Bourousis (3) -equipo inicial-, Campazzo (-), Rivers (7), Ayón (2), Carroll (10), Reyes (4) y Mejri (2).
Árbitros: Pérez Pizarro, Cortés, Martínez Fernández. Sin eliminados.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 13ª jornada de la Liga ACB, disputado en el Palau Blaugrana de Barcelona ante 7.261 espectadores.
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