La Audiencia Nacional abre otro 'caso Neymar'

El juez José de la Mata vuelve a poner contra las cuerdas al Barça por el fichaje de Neymar al admitir ahora una querella  de una empresa de inversión de Brasil (DIS) contra el delantero, Sandro Rosell, Josep Maria Bartomeu y los directivos del Santos por un delito de corrupción y otro de estafa. Esta decisión se produce después de que la sala penal de la Audiencia Nacional haya enviado a Barcelona la causa por delitos fiscales cometidos en la contratación del astro brasileño.

El magistrado, con el visto bueno de la fiscalía, decide ahora investigar si Neymar se comprometió con el Barça en el 2011 a rechazar las ofertas de otros clubs «en su propio beneficio, por razones espurias» y por tanto incumplió su contrato con DIS que poseía el 40% sobre los derechos económicos de los derechos federativos del jugador cuando jugaba en el Santos.

DIS sostiene que solo ha cobrado por los 17 millones que percibió el Santos por el traspaso de Neymar, pero no por el resto de los contratos firmados por el Barça para conseguir el fichaje del astro en el 2011 y el 2013. Por ello, el juez ha ordenado al Chelsea, Madrid, Bayern y Manchester City que le hagan llegar «copia de las ofertas o propuestas de traspaso» que realizaron a Neymar entre el 2009 y el 2013 para verificar si la contratación por el Barça ha alterado «el libre mercado de fichajes» ante la imposibilidad de que el jugador «entrase en el mercado conforme a las reglas de libre competencia y pudiera obtener una mayor cantidad económica por el traspaso».

LA COMPETENCIA Y LA MATIZACIÓN / El juez, para evitar los problemas de competencia de la anterior causa, sostiene que los delitos se han cometido en Brasil por Rosell y Bartomeu y deben ser investigados en la Audiencia Nacional. También anuncia que, de momento, no tiene previsto llamar a declarar a los querellados. No obstante, la apertura de esta investigación va a marcar las elecciones a la presidencia del Barça, previstas para el próximo 18 de julio.

El club azulgrana emitió una nota negando, de nuevo, cualquier incorrección en el fichaje de Neymar. Aludió a la «inconsistencia jurídica» de la acusación y negó la existencia de los delitos de soborno y corrupción alegando que el futbolista «solo quería jugar en el Barça».