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La Audiencia de Barcelona condena al Barça por el fichaje de Neymar

Neymar controla el balón en el Barça-Granada del Camp Nou.

Neymar controla el balón en el Barça-Granada del Camp Nou. / periodico

J. G. ALBALAT / BARCELONA

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La Audiencia de Barcelona ha condenado este miércoles al FC Barcelona al pago de dos multas por un importe total de 5,5 millones de euros por dos delitos de fraude a Hacienda en el fichaje de Neymartras haber llegado a un acuerdo con la fiscalía y la Abogacía del EstadoAbogacía del Estado.

En una preve, en la que se ha ratificado el pacto, el presidente del tribunal de la Sección Octava dictó sentencia "in voce" en los mismos términos del acuerdo, en el que se aplican las atenuantes de reparación de daño (pago a la Agencia Tributaria de 13 millones de euros) y el de establecimientos de medidas eficaces para prevenir y descubrir delitos que en un futuro puedan cometerse. Como representante del club ha comparecido el jefe de la asesoría jurídica, Ramón Gómez Pontí, y el abogado penalista Cristobal Martell. 

MAL MENOR

El pacto entre el Barça y las acusaciones implicaba también que el actual presidente azulgrana y el expresidente, Josep Maria Bartomeu y Sandro Rosell quedaran exonerados y la causa se archivara parar ellos, mientras que la entidad barcelonista, como entidad jurídica, asumía la responsabilidad de los delitos cometidos en los ejercicios 2011 y 2013. Del año 2014 fue exculpado. El fiscal pedía siete años y seis meses de prisión para Bartomeu y tres meses para Rosell. 

El club considera el pacto como un mal menor, ya que la fiscalía reclamaba 22,2 millones de euros. Sin embargo, el club ya llevó a cabo, a principios del 2014, una declaración complementaria de 13,5 millones.

Según el acuerdo, a lo largo del 2011, Rosell, en su calidad de presidente del Barça, inició las negociaciones con el delantero brasileño para incorporarlo a la plantilla. Como consecuencia d estas conversaciones, las dos partes llegaron a un acuerdo por la que el club azulgrana pagaría 40 millones de uros como “prima fichaje”. Como anticipó el Barcelona pagó 10 millones para asegurarse el fichaje que, de manera definitiva, debía producirse en el 2014. También se firmó un contrato de imagen con la sociedad N&N (propiedad de la familia Neymar).

ANTICIPAR EL FICHAJE

Sin embargo, en el 2013 los directivos del Barça tomaron la decisión de anticipar el fichaje de Neymar a ese mismo año. Dicha decisión supuso, entre otras cuestiones, la necesidad de abonar una cantidad al jugador superior a la inicialmente prevista en el 2011. Para ello se formalizaron una serie de contratos con tres sociedades vinculadas a la familia del jugador.

El acuerdo refleja que “la finalidad última” de la utilización de tales sociedades era “aparentar que los pagos” obedecían a operaciones mercantiles con esas empresas y “fragmentar” la verdadera retribución del jugador para ”mantenerla oculta”. Estas sociedades, por lo tanto, solo operaron como “intermediarias” en los pagos satisfechos por el club.

Pero el objetivo “principal” de esta operación era, según el pacto este miércoles corroborado, era reducir el coste para la entidad que suponía la incorporación del jugador, “y ello por el procedimiento de eludir o minorar subrepticiamente la tributación” a Hacienda. Es decir, se simuló “el objeto real de los pagos”, que en realidad no era el formalmente declarado, sino encubrir las verdaderas retribuciones al jugador. De este modo, se eludió, “en su mayor parte”, el pago de los impuestos derivados de los rendimientos de trabajo que debían haber tributado por el Impuesto de Renta de no Residentes, ya que en el 2013 Neymar no llegó a residir en España más de 183 días.

Por los contratos firmados en el 2011 y en el 2013, la Agencia Tributaria entendió que se había defraudado a Hacienda 9.1 millones de euros, que ya han sido satisfechos al fisco por el club con la declaración complementaria de 13,5 millones de euros de principios del 2014.

En la Audiencia Nacional, en Madrid, se sigue otro proceso judicial por el fichaje del jugador brasileño que no tiene nada que ver con el que en la Audiencia de Barcelona se ha cerrado este miércoles con la sentencia condenatoria.