El Mundial femenino

Las chicas de bronce

La selección confirma su salto a la élite y rubrica su participación en el torneo con el tercer puesto «Es un hito del que hay que estar orgullosos», dice el presidente José Luis Sáez

Euforia 8 El equipo de José Ignacio Hernández celebra el bronce, ayer en Karlovy Vary (República Checa).

Euforia 8 El equipo de José Ignacio Hernández celebra el bronce, ayer en Karlovy Vary (República Checa).

LUIS MENDIOLA
BARCELONA

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España cruzó ayer el umbral de la élite del baloncesto femenino, con una medalla de bronce en el Campeonato del Mundo que sabe a gloria. La selección de José Ignacio Hernández se subió al podio del torneo, junto a EEUU y la República Checa, y alcanzó así la mejor clasificación de su historia, para cumplir de sobras con el objetivo que se había marcado antes de jugar.

«Este grupo de jugadoras se lo merece todo. Han trabajado, han sufrido y han disfrutado haciéndonos vivir con ellas un hito histórico del que debemos sentirnos orgullosos», recalcó el presidente de la federación, José Luis Sáez, que acompañará al equipo en el vuelo de regreso a Madrid, previsto para hoy al mediodía.«Es un éxito del baloncesto femenino español, gracias al trabajo de muchos años, de mucha gente», subrayó, por su parte, el seleccionador.«Para nosotros se trata de una medalla de bronce que sabe a oro».

La incorporación de la pívot Sancho Lyttle, nacida en la isla caribeña San Vicente e Islas Granadinas, ha acabado de fortificar en este torneo a un grupo sólido, que se había subido al podio en los cinco últimos europeos, pero que nunca había superado la barrera de los cuartos de final en el Mundial.«Ha sido una experiencia increíble la que me ha permitido vivir la federación y estoy deseando volver a repetirla el año que viene», proclamó Lyttle, jugadora del Perfumerías Avenida de Salamanca.

El mérito, en cualquier caso, no es solo de Lyttle. En la República Checa se ha vuelto a demostrar el liderazgo de Amaya Valdemoro y de Ana Montaña, y el papel emergente de jugadoras como Alba Torrens, de Marta Fernández, la hermana de Rudy, y de Laura Nicholls, que garantizan el relevo.

«Este es el triunfo de la fe de un equipo que ha creído en sus posibilidades hasta el final», subrayó la jugadora madrileña, de 34 años, que cuenta con un palmarés envidiable, incluidos tres anillos de la WNBA con las Houston Comets.«Espero que este resultado sirva para que el gran público se asome a la realidad del baloncesto femenino porque tenemos algo que decir y hoy lo hemos demostrado», proclamó en tono reivindicativo.

Perugia en el recuerdo

Con solo 17 años, Valdemoro ya participó como debutante en la que fue la primera gesta de las chicas: el oro del Europeo de 1993, con Blanca Ares, la esposa del seleccionador Sergio Scariolo, como mejor referente, y con nombres históricos como los de Marina Ferragut, Ana Belén Alonso o Elisabeth Cebrián. Y ayer, proclamó que su objetivo es alcanzar los Juegos de Londres 2012.«Es uno de los retos que me quedan por cumplir», dijo Valdemoro, la jugadora más determinante del básquet español.

A nivel individual, tanto Valdemoro como Lyttle merecieron el reconocimiento también del seleccionador. «Han estado a un grandísimo nivel, de las mejores del campeonato en muchos aspectos», indicó José Ignacio Hernández, que se ha estrenado a lo grande en el banquillo de la selección.