Chantal Aimée: "No podía fijarme en Liz Taylor"

-¿Qué le pasó por la cabeza cuando Àlex Rigola le planteó el papel?-Me hizo mucha ilusión, cómo no. Fue hace casi dos años, creo; soy muy mala para las fechas. Nos dijo que era un premio que nos dábamos los tres después de tanto tiempo juntos. Pero no me volví loca porque faltaba mucho. Y no me puse en serio con el texto hasta los ensayos.

-¿Ha visto para prepararse la película con Liz Taylor y Paul Newman?-He vuelto a verla porque la tenía medio olvidada. Pero no podía fijarme en Liz Taylor para trabajar mi personaje porque no tiene nada que ver. La esencia de la obra es la misma pero hay muchas infidelidades.

-¿Por ejemplo?-Somos una pareja adulta, que lleva más años juntos. Un poco como nos ocurre a Joan y a mí, que hace muchos años que somos pareja teatral. Nos entendemos con un guiño.

-¿Rigola les aconsejó no ver la película antes de los ensayos?-No dijo nada. Sí nos habló de la serieMad Men, principalmente por cuestiones de vestuario y de ambiente. He visto la primera temporada.

-El tema de la homosexualidad es recurrente al hablar de la obra.-Es uno más en la versión de Àlex. La historia está llena de temas trascendentes como el desamor en mayúsculas, la familia, la enfermedad, las ilusiones perdidas, la muerte... Son unas cuestiones fuertes que a todos nos tocan y con los que que es difícil no sentirse identificado.

-No se sacará con facilidad el traje de Maggie al acabar la función.-Joan siempre dice que deja su personaje en la ducha y yo intento hacer lo mismo. No me lo quiero llevar a casa. Pero sí es verdad que esta obra te pide una implicación emocional muy fuerte, muy intensa. Es agotadora y eso que no es muy larga.

-¿El hecho de reabrir el Lliure hace que resulte un estreno especial? Y no es una histórica del teatro...-Es algo externo y no lo puedes vivir desde dentro. Yo tendría igual implicación si estrenara en Viladecans. Lógicamente sí me hace mucha ilusión participar en esta reapertura, aunque hubiera entendido un estreno con históricos de la casa.