EXPLORACIÓN ESPACIAL

El satélite chino dedicado a buscar materia oscura detecta 1.600 millones de partículas

El Wukong, lanzado a finales del año pasado, orbita a 500 kilómetros de altura

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El satélite que China lanzó al espacio el año pasado para explorar la materia oscura del Universo, considerada la parte invisible del cosmos, ha detectado ya 1.600 millones de partículas, según ha informado el diario oficial Global Times.

Los científicos tendrán ahora que analizar la información obtenida para tratar de comprender cómo es y de qué está hecha una materia que es cinco veces más abundante que la visible -compuesta por átomos- y que se piensa que constituye la mayor parte del Universo.

Los científicos establecieron la existencia de la materia oscura en la década de 1970, por sus efectos gravitacionales en la materia visible, aunque su conocimiento sobre ella es muy escaso.

El director de ingeniería del satélite, Wu Jian, explicó que los investigadores han revisado los sistemas de calibrado del dispositivo para garantizar la máxima precisión de sus observaciones.

El satélite para la materia oscura chino, llamado Wukong, fue lanzado el 17 de diciembre de 2015 y, tras casi un año en funcionamiento, se encuentra actualmente en una órbita a 504 kilómetros de altitud desarrollando sus operaciones con normalidad.

En este satélite se incluye un telescopio espacial, el primero de China, que observa la dirección, energía y carga eléctrica de las partículas espaciales de alta energía.

Está previsto que durante sus dos primeros años de operaciones el telescopio busque en todas las direcciones y, pasada esa primera etapa, centre su actividad en las zonas donde los resultados iniciales sean más prometedores.

Por otra parte, China lanzó hoy al espacio con éxito un nuevo satélite de observación meteorológica, el Yunhai-1, desde la base espacial de Jiuquan (norte), en el desierto de Gobi, impulsado por un cohete de la serie Larga Marcha-2D.

Este satélite, desarrollado por la Academia de Tecnología de Vuelos Espaciales de Shanghái, se dedicará a la observación atmosférica, marina y del espacio y a la prevención de desastres meteorológicos, así como a realizar experimentos científicos.