La NASA intenta descubrir el enigma de los brillos extraños de la Luna

Los científicos estrellarán una nave tras analizar el polvo en suspensión a poca altura de la superficie del satélite

La Luna.

La Luna. / kb/fsp

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Una nave de la NASA chocará contra la Luna el próximo 21 de abril. El objetivo de la misión es buscar la respuesta a un brillo extraño en el horizonte de la Luna, visto por los astronautas del Apolo en varias ocasiones justo antes del amanecer. "Hasta ahora no hemos dado con una explicación", ha declarado en rueda de prensa Rick Elphic, uno de los científicos del proyecto, que trabaja en el Centro de Investigación Ames de la NASA.

La hipótesis más probable que apuntan los expertos es que el fenómeno se debe a un efecto de los rayos ultravioletas del Sol, que al incidir con las partículas de polvo lunar se cargan eléctricamente. Ese polvo forma una nube que refleja la luz y hace que los astronautas perciban algo parecido a un espejismo. 

Análisis del polvo lunar

A medida que el aparato se acerque a la superficie lunar, apuntará su rastreador de estrellas hacia el horizonte para tratar de replicar el ángulo y las condiciones bajo las cuales los astronautas ven el resplandor. Pese a que el rastreador de estrellas no está diseñado para obtener imágenes de alta resolución, los científicos opinan que vale la pena intentar el experimento. Lo más probable es que no sea posible reproducir con exactitud las condiciones idóneas que hacen que ese fenómeno óptico sea detectable, señala la revista científica 'Nature'.

En los próximos días, los directores de la misión guiarán a la nave para que cumpla una trayectoria que le llevará a solo tres kilómetros por encima de las montañas lunares denominadas Apeninos. El objetivo será analizar qué tipo de polvo queda en suspensión cerca de la superficie. La nave se estrellará después.

En su misión principal, la nave hizo las mejores mediciones del envoltorio de polvo de la Luna generado por pequeños meteoritos que bombardean la superficie. La misión también descubrió átomos de neónmagnesio y aluminio.