LA VOLTA A CATALUNYA

Una escapada para aprender

Los jóvenes Soler y Verona se cuelan en la fuga del día y Contador se cae a tres kilómetros de Port Aventura

Marc Soler, comiendo en plena etapa.

Marc Soler, comiendo en plena etapa. / periodico

SERGI LÓPEZ-EGEA / VILA-SECA

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Cuando se buscan jóvenes arrogantes que un día no muy lejano se puedan convertir en el relevo natural de ciclistas como Alberto Contador (este sábado se ha caído y ha sufrido diversas magulladuras) y Alejandro Valverde hay que mirar hacia los noveles, los que necesitan crecer, en una carrera de la importancia de la Volta, y más por su cartel, ciclistas que necesariamente precisan aprender y examinarse en escapadas; en la pelea por la victoria de la etapa.

Y en esta circunstancia se han encontrado en la sexta y penúltima etapa de la Volta 2015 los jóvenes Marc Soler, de Vilanova i la Geltrú, y Carlos Verona, que aunque es madrileño hace ya tiempo que vive en Matadepera, la 'patria' de José Luis Laguía, uno de los directores del Movistar en la ronda catalana.

VICTORIA DE CHERNETSKI

Soler ha debutado este año en el Movistar y la Volta es su primera carrera World Tour, después de haber disputado el Tour de San Luis, en Argentina, y la Strade Bianche, en Italia. Solo tiene 21 años; de la mano de su mánager, Àngel Edo, que también lo es de Purito, llegó al Movistar, tal vez el equipo que más sabe cuidar a los jóvenes, con la experiencia de ver crecer un día a Miguel Induráin Pedro Delgado.

Verona, de 22 años, tiene ya algo más de experiencia. Forma parte de la plantilla del Etixx, antes Omega, uno de los conjuntos con mayor número de estrellas en sus filas; entre otros, Tony MartinMark CavendishRigoberto Urán y el campeón del mundo Michal Kwiatkowski. El año pasado, por ejemplo, debutó en la Vuelta.

Pues ambos se han sabido mover en la escapada del día, entre Cervera, la villa natal de los hermanos Márquez, y la entrada del parte temático de Port Aventura, donde ha finalizado una etapa que ha recorrido buena parte de las comarcas tarraconenses desde las leridanas. Verona trabajó sobre todo para su compañero Julian Alaphilippe, segundo por detrás del vencedor, el ruso del Katusha Sergei Chernetski.

LA CAÍDA DE CONTADOR

En cambio, Soler aguardó su oportunidad, con buena planta en la escapada, para entrar en la pelea por la victoria. Llegó en cuarta posición.

Por detrás, en el pelotón de las figuras, con el líder Richie Porte, poco se pudo hacer, ya que el viento fue menos fiero que el viernes. Nada destacado habría ocurrido de no haberse ido al suelo, a tres kilómetros de la meta, Contador. Sucedió en una rotonda, un corredor del equipo de Colombia se le cruzó, rozó su bici y el madrileño se cayó. Un portavoz de su equipo explicó que solo sufre heridas superficiales, quemaduras por el roce con el suelo en el brazo, glúteo y pierna izquierdos.

Estos golpes, aparentemente, no deben enturbiar la pelea por la victoria, en Montjuïc. La Volta llega este domingo totalmente llena de vida a la última etapa, con la incertidumbre, sobre todo gracias a las bonificaciones, de quién se llevará el premio final. Entre el primero (Porte) y el quinto, Urán, solo hay 18 segundos de diferencia. Se repite el circuito de los dos últimos años (en el 2014 se tuvo que recortar, por el peligro, a causa de la lluvia), que incluye ocho ascensiones a Montjuïc.

En la meta hay 10 segundos decisivos de bonificación para el vencedor. Se ha cambiado el horario, en referencia a los últimos años. La Volta se decide en la montaña barcelonesa entre las 13.30 y las 14.30 horas.