Esta vez no hay vuelta atrás, Purito se retira

El ciclista catalán anuncia que se integra en el equipo Bahréin-Merida como asesor y no como corredor

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SERGI LÓPEZ-EGEA / BARCELONA

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Hubo un día, una mañana mejor dicho, en la que Joaquim 'Purito' Rodríguez reunió a la prensa desplazada al Tour 2016 en Les Escaldes (Andorra) para comunicarles que este año era el último, que se retiraba. Y rompió a llorar, emocionado, mientras su familia y sus amigos andorranos (el país donde vive) irrumpían en aplausos. Quedaba todavía un par de semanas de ronda francesa, en las que el corredor catalán, con la mente pensando en que era su última actuación camino de París, solo luchó por acabar  en el 'top ten' de la carrera, lo que consiguió.

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Vinieron después los Juegos Olímpicos. Él compartió con Alejandro Valverde la jefatura del equipo español y a falta de una vuelta para el final de la carrera, el ciclista murciano le hizo un gesto, le hizo ver que no pedaleaba como le gustaría y que se liara él en la pelea por las medallas. Se ganó un diploma olímpico y guardó el 'maillot' de la selección española en su maleta, convencido de que había sido su última carrera. Unos días antes atendió a un pequeño grupo de periodistas españoles que cubrían los Juegos y les hizo saber que la prueba de ruta de Río era su última competición.

SIN VUELTA 2016

Durante la Vuelta, donde el equipo Katusha quería tenerlo como jefe de filas, su ausencia se hizo notar en la escuadra rusa hasta el punto de que dio la sensación de que la comunicación no había sido la perfecta entre el líder del equipo y los máximos responsables del conjunto. Cuando Purito visitó la Vuelta, en Castellón, hizo saber que el equipo le había pedido --o más bien obligado-- a disputar varias carreras de final de temporada: Piamonte, Turín-Milán, Giro de Lombardía y la ronda a Abu Dabi. Al final todo se quedó con la participación en el Giro de Lombardía, donde Purito cuenta con dos victorias, una carrera donde abandonó. Ahí parecía que ponía punto y final a su etapa como corredor profesional.

Pero llegó el conjunto Bahréin-Merida, impulsado por un príncipe de aquel país árabe, que puso los 'petrodólares' encima de la mesa de Purito, después de fichar a Vincenzo Nibali como máximo reclamo. ¿Por qué insistió tanto y tanto el conjunto árabe por contratar a Purito? Pues porque entre septiembre y octubre, cuando se efectuó el contacto, necesitaban sus puntos para ganarse con seguridad una plaza entre los mejores equipos del mundo y para no estar pendiente durante el 2017 de las invitaciones a las carreras.

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PLAZA CONSEGUIDA

Ahora, el Bahréin ya se ha ganado la plaza que quería con los mismos derechos, por citar algunos equipos, que el Movistar o el Sky. Purito ya no tiene la necesidad de correr como profesional, algo que no entraba en sus planes, y sencillamente se incorporará al conjunto árabe como asesor, como colaborador, como instructor de los ciclistas más jóvenes.

Esta vez sí, esta vez no ha sido un no es no, ni un no entre la abstención por seguir o colgar la bici. Esta vez Purito se retira (definitivamente).

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