altercado en el norte de la ciudad

Una gran pelea juvenil causa el pánico en Nou Barris

La plaza de Àngel Petaña, ayer por la tarde.

La plaza de Àngel Petaña, ayer por la tarde.

J. G. ALBALAT / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

«Han venido unos a la plaza con barras de metal y de todo. Y han venido un montón, un montón, un montón de policías. No te puedes ni imaginar. Se han ido corriendo para abajo. No vayáis por el polideportivo por si están por allí». Este es el mensaje de voz que el pasado viernes envió a su madre una niña de 14 años que se encontraba en la plaza de Àngel Pestaña, en Nou Barris. Pasaban unos minutos de las seis de la tarde. Los vecinos que estaban en el lugar se quedaron aterrorizados cuando un grupo de más de 50 jovenes -algunas fuentes elevan la cifra a 80- de entre 13 y 17 años y de diversas nacionalidades irrumpieron en la plaza con palos, barras de hierro, bates de béisbol, palos de hokey, tuberías de plástico y navajas, amenazando y golpeando a quien se interpusiera en su camino. «Te voy a coger y a matar», gritó uno de los agresor, según varios testigos presenciales. Se habían citado a través de las redes sociales para pelarse con otros muchachos, algunos del barrio.

Los padres que vigilaban como sus hijos jugaban en la plaza de Àngel Pestaña, a unos metros del casal de la Prosperitat, salieron corriendo ante la multitud que se les venía encima. «Agarré a mi hijo y me escondí», aseguró ayer a este diario una mujer. Los agresores, según los testigos, llegaron a la plaza por la calle de Sant Francesc Xavier. Al parecer, el grupo había viajado en metro hasta la estación de Via Júlia, donde se apeó. De allí se dirigió a la plaza. Había chicas y chicos. Procedían, según fuentes de la investigación, de distintos puntos de Barcelona. Habían latinos, magrebís y españoles. Algunos de ellos se tapaban parte de la cara con un pañuelo.

Persecución

Los agresores se habían citado en la plaza para pelearse con otro grupo de muchachos, algunos de ellos del barrio, reconoció una vecina. Cuando estos últimos vieron llegar al grupo armado con palos, salieron corriendo. La persecución se prolongó por las calles cercanas, hasta que la policía tomó la zona y tranquilizó a los vecinos. «Esta mañana todavía había un palo debajo de un coche», dijo una mujer.

Los Mossos, según fuentes del mismo cuerpo, habían recibido cuatro horas antes la llamada de una mujer que alertó de que un grupo de jóvenes había quedado en la plaza de Àngel Pestaña por la tarde para pelearse. La policía autonómica organizó un dispositivo de prevención. No solo envió coches patrullas, que dieron vueltas por el barrio durante toda la tarde, sino también agentes de paisano. Los testigos afirmaron ayer que en el momento en que la multitud armada con palos irrumpió en la plaza no había ningún policía uniformado. Sin embargo, los Mossos precisan que también habían agentes de paisano.

Según la policía autonómica, un menor de 13 años resultó herido leve y fue atendido por el Servicio d'Emergències Mèdiques. «A un chaval le hicieron un corte en la cara y a otro le dieron con un palo en la cabeza», indicó un vecino. Ocho jóvenes fueron identificados por los Mossos y los agentes se incautaron de palos. No se produjo ninguna detención, aunque se ha abierto una investigación. Los Mossos descartan que se tratara de una pelea entre bandas latinas y aseguran que fue la presencia policial la que evitó que se produjera una verdadera reyerta.