BARCELONEANDO

Una familia en funciones

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JAVIER PÉREZ ANDÚJAR / BARCELONA

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Antes a las familias les salía una hija o un hijo artista, o motorista, o filólogo, u objetor, y ya vivían para siempre con la preocupación a la vuelta de la esquina. Pero luego no volvían las esquinas, pues las familias de antes se estaban toda la vida quietas en el mismo sitio. Esto no es hablar por hablar. O sí, pero hablar por hablar es una fórmula de liberación. Lo dijo Novalis, que era padre de familia numerosa (primero tuvo a todos los románticos, y más tarde a todos los surrealistas).

El Gusano Impasible es una familia que ha ido formándose a base de liberaciones, dando esquinazo a todo lo que no oliese a libertad. Es una familia de artistas que de vez en cuando monta una función y cita a los amigos para que la vean, y luego todos los miembros de la familia se vuelven a sus cosas, que consisten en seguir estando juntos sin importarles ni el mercado (el cultural, no el de comprar la comida) ni nada similar. Básicamente, la familia del Gusano Impasible hace lo que le da la gana y cuando quiere, y bien que hace. Si actúan en su taller de la calle Riereta, en el Raval, se cambian el nombre y se ponen Riereta Trece. A veces parece que vaya a ser definitivo, pues tal lugar es por donde más acostumbra a asomar últimamente este maravilloso gusano impasible (que no tiene tantos humos como la oruga azul de Alicia en el País de las Maravillas).

La familia está integrada por Ramón Colomina (también llamado Tornasol), Silvia Genovés, Lu Colomina (hija de ambos), Paloma Unzueta y Nahui Domínguez (hijo de Paloma). Lu y Nahui son ahora adolescentes, pero han crecido trabajando en los números familiares, se les ha visto actuar desde pequeños, y la verdad es que resulta fascinante ser testigo desde el público de la formación, no ya de un artista, sino de dos muy diferentes que aprenden juntos en lo mismo. Siempre colabora en todos los montajes algún amigo. En este nuevo número, que se titula 'StarSinSer', participa el ilustrador brasileño Flavio Morais. Por ejemplo, suyo es un enorme libro que irrumpe en escena.

TÍTULO FILOSÓFICO

Es cierto que StarSinSer resulta un título filosófico, pero es que Ramón, como artista, tiende a la filosofía, pues procede de ella. Su historia es la de un estudiante de Filosofía de la Barcelona underground de los años 70, que dejó la carrera en quinto y se fue a aprender claqué. Artísticamente, Ramón pertenece a la danza, y después del claqué estudió con Pina Bausch. También es dibujante y había publicado historietas con Roger en El Víbora (allí firmaba Tornasol). El Ramón dibujante y el Ramón gestual (al que a veces llaman mimo, y le da rabia pues realmente no lo es), se encuentran en una de sus principales influencias, que son las historietas mudas de aquella delicia de Otto Soglow llamada 'El pequeño rey'. Ramón es el individualismo hasta la audacia y es a la vez un sentido vital de la familia. Su prehistoria es la de una familia modesta en un barrio alto de la ciudad. Seis hermanos con un padre comunista en los años de la dictadura, que se ganaba la vida con un camión. A Ramón, lo que le ha quedado de la filosofía (y quizá lo que le llevó a la filosofía), es la fascinación por la pregunta, por preguntarse. Las preguntas brotan en los textos de todas sus obras. Nunca ha renunciado a la filosofía, y esto se ve, además de en su gusto por la pregunta, en su sugestión ante el logos, la palabra entendida como razonamiento. Ramón es un intelectual que baila, que ha preferido los pies a la cabeza, y todo eso está en su teatro, y en su teatralidad.

Silvia Genovés, como su propio nombre indica, es hija de Juan Genovés, el comprometido pintor que en 1976 plasmó el fin del franquismo en su cuadro El Abrazo. Silvia también es artista plástica, y de hecho la plasticidad, la iconografía entre psicodélica y primitiva (imaginativa y esencial), de los montajes se debe a ella (y mucho más). Silvia no es nada filosófica, más bien es de acción directa, y sin embargo siempre anda discretamente por los márgenes de las representaciones. También es cierto que a la gente de acción no le gusta llamar la atención, prefiere hacer a manifestar. Silvia Genovés y Paloma Unzueta son las dos matriarcas de esta familia, pero han decidido no ejercer el matriarcado. Paloma fue trapecista en un circo y ejecutaba números muy peligrosos. Todavía, algún día de su cumpleaños se ha subido a hacer equilibrios a un muro del barrio gótico. Ahora baila apasionadamente e interpreta personajes que también se hacen muchas preguntas. Su tío (bueno, un primo de su madre), era el académico Ricardo Gullón, experto en modernismo y muy amigo del poeta Juan Ramón Jiménez. Silvia y Paloma son madrileñas que viven desde hace siglos en Barcelona. Ramón lo hizo al revés, vivió hace siglos en Madrid. El Gusano Impasible es pura dialéctica. ¿Hay síntesis? No, es una dialéctica perpetua que prosigue oyendo cantar a Lu 'Ne me quitte pas' y viendo a Nahui hacer trucos de magia. Todos los viernes de mayo y junio, van a tener abierto el taller de Riereta.