ESTEBAN GALLEGO / POBLENOU

Una epopeya de dos años

Esteban Gallego, en su piso de alquiler que comparte con su pareja.

Esteban Gallego, en su piso de alquiler que comparte con su pareja.

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Dos años tardaron Esteban y su pareja Clara, de 31 años, en encontrar un piso de alquiler. «Nos lo tomamos con calma porque no teníamos prisa, pero en verdad nos costó bastante porque el mercado está fatal. Los precios en el Poblenou, donde vivimos desde hace años, son altísimos. Olvídate de encontrar algo decente por menos de 700 euros. Creo que la marca Barcelona encarece una barbaridad. Hay una diferencia brutal con Terrassa, un sitio que también conozco, pero claro, como los dos trabajamos en la capital hicimos cálculos y no nos salía a cuenta por el transporte público», relata Esteban.

Para dar con el piso adecuado tuvieron que renunciar a varios requisitos como calefacción o ascensor, aún así están satisfechos porque a cambio han ganado luz y espacio. «Siempre tienes que priorizar, pero estamos contentos», afirma. Eso sí, tenían claro que el lugar escogido sería el Poblenou. «Nos gusta mucho porque es céntrico y se hace mucha vida de barrio», confirma Clara.

La pareja siempre ha tenido claro que buscaba un piso de alquiler. Esteban y Clara nunca han contemplado la opción de compra, porque como afirma el joven, no querían enfrascarse en un proceso hipotecario que les «sentenciaría a una vida precaria». «Además, permaneceríamos con la angustia de conservar nuestro trabajo para poder continuar pagando las cuotas. Ambos tenemos contratos indefinidos pero nunca se sabe», finaliza el joven.  MIREIA MOYA