El top manta regresa al centro de la ciudad

Los manteros no tienen un plan B. No se lo ha ofrecido el Ayuntamiento de Barcelona y no han tenido tiempo de buscárselo ellos mismos, ya que la instalación de un 'skatepark' provisional en lo que durante los últimos meses ha sido su lugar de trabajo les ha cogido a traspiés. "No estábamos avisados de la operación. Esta mañana se lo han encontrado unos pocos compañeros que han llegado al puerto a primera hora y les han decomisado la mercancía", asegura Mame Mor, uno de los portavoces del colectivo.

Pese a esa falta de plan B, el colectivo no va quedarse de brazos cruzados. "Tenemos que trabajar para vivir", recuerdan. "Volveremos a lo de antes, no nos queda otra. Algunos al paseo de Gràcia, otros a Colón, a la plaza de Catalunya, al parque Güell...", anuncia Mor, quien añade que no tienen ninguna cita con el ayuntamiento para ofrecerles soluciones.

Críticas de patinadores al 'skate park' provisional de la Barceloneta

"SOLOS SOMOS AÚN MÁS DÉBILES"

Para el colectivo de manteros la expulsión del Port Vell ha sido un mazazo, ya que era una zona "segura" para ellos, donde podían extender su mercancía sin el temor de tener que salir corriendo. "Ya nos persiguen por partes de la ciudad, cuando estamos solos, aquí estábamos tranquilos porque éramos muchos y estábamos juntos", apunta otro mantero. Esa unidad, que se materializó con la creación del Sindicato Mantero, organización creada para defenderse y tener voz, es la que temen perder con la dispersión. "Solos somos aún más débiles", aseguran. Estarán atentos, prosiguen, a los próximos movimientos del ayuntamiento, para intentar organizar una respuesta. Como mínimo, de momento, tienen un lugar donde prepararla, ya que la mediación del ayuntamiento aplazó el desalojo del Espacio del Inmigrante, punto de encuentro del Sindicato Mantero, programado para el pasado martes.

PERSECUCIÓN EN PUNTOS CALIENTES

En los últimos meses, la presencia de manteros en el centro, donde ahora advierten de que volverán, había disminuido ya que en ellas sí había persecución policial.   

El teniente de alcalde Gerardo Pisarello ha asegurado este viernes ser consciente de que algunos de los manteros se repartirán por el centro, pero asegura que lo que más le preocupa son los "usos intensivos y abusivos" del espacio público. El primer teniente de alcalde ha apuntado que en la ciudad no habrá "zonas francas" para manteros y que el dispositivo policial contra la venta ambulante estará en marcha por todo el centro para evitar la creación de nuevos puntos calientes, ya que el fenómeno "no desaparece de la noche al día". No obstante, la menor presión policial mostrada en muchos momentos mientras se buscaban otras soluciones ha llevado a un volumen de venta ambulante mayor que nunca en la ciudad.